APORTACIÓN DEL DEPORTE Y EL EJERCICIO A NUESTRA VIDA

Los beneficios de la actividad física a nuestra salud y a nuestro bienestar psicológico y emocional son innumerables, pero trataremos de hacer aquí un pequeño resumen y sobre todo, centrarnos en los mentales que creemos los más importantes.
La mayoría de la gente hace deporte para adelgazar, para tener un cuerpo mejor, para poder comer más, para alimentar su ego… en fin, objetivos que sin ser malos en sí mismos entendemos que no son los deseables. Es evidente que haciendo deporte se consiguen esos objetivos, pero deberían ser tomados como efectos positivos colaterales y no como nuestra motivación principal. Si tú haces deporte para adelgazar, en cuanto no tengas los resultados esperados abandonarás. Si tú haces deporte para tener un cuerpo mejor y no trabajas tu parte psicológica y emocional, nunca estarás satisfecho, nunca será suficiente y en vez de ser un placer y un beneficio el hacer deporte, se convertirá en una obsesión y te provocará ansiedad e inseguridad. Si lo haces para poder comer más, también grave error, pues la comida debe estar al servicio de tu salud, de tus necesidades nutricionales para proporcionarte una vida mejor y como medio para experimentar sensaciones agradables que provoquen unas relaciones sociales positivas o que preparen una noche de amor interminable con tu pareja. La comida debe ser un medio, no un fin. Cuando te vayas de viaje y lo que recuerdes y cuentes con más pasión sean las comidas y no los lugares, las sensaciones y tus relaciones… Houston tenemos un problema. Si haces deporte para alimentar tu ego, tampoco es el camino. El deporte debe ser practicado como una lucha contigo mismo, sin comparaciones. Tu comparación sólo debe ser contigo mismo, hoy debes ser mejor de lo que fuiste ayer y luchar por ello. Los demás, el grupo sólo debe servir como motivación, como apoyo para conseguir tus objetivos.
¿Qué es, por lo tanto, lo que debemos buscar en el deporte y las actividades físicas?
Debemos buscar disciplina, espíritu de sacrificio y superación, explorar nuestros límites, conseguir nuestros objetivos, mantener nuestro cuerpo y nuestra mente de una manera sana, segregar endorfinas. Como veis, casi todos los objetivos son mentales, y esta debe ser nuestra determinación, haremos deporte para entrenar la mente. De nada sirve ser la persona más atractiva del mundo y tener el mejor cuerpo si no tenemos confianza en nosotros mismos, si estamos acostumbrados a aceptar la vida como nos viene, a no conseguir nuestros objetivos y en definitiva, a no gestionar nuestra vida como nosotros queremos. Esto no quiere decir que la vida nos vaya bien, la vida es dura y a veces, muy dura, pero por lo menos tienes que sentir que gestionas tu vida y que luchas por conseguir tus objetivos.
¿Y cómo entrenamos la mente? Pues a través de una intensa actividad social e intelectual y a través del deporte y de las actividades físicas.
¿Qué difícil es marcarnos un plan de trabajo físico y meterlo en nuestra vida, verdad? ¿Qué difícil es sacar tiempo para ir a un Gimnasio? De ahí la necesidad de la disciplina. Tenemos que ser disciplinados. No podemos aspirar a estar mejor, a ser mejores sin disciplina para hacer cambios en nuestra vida. Como nuestra higiene personal, el lavarte los dientes, etc., el deporte y la actividad física no puede ser cuestionada. Es necesaria para nuestra salud física y mental. Aplica disciplina, no falles y poco a poco te darás cuenta que empiezas a tener disciplina para todo lo que te propongas, no sólo para el deporte.
Empezar a hacer deporte y actividades físicas, es duro, tenemos dolores, cuesta coger la forma y el hábito. Si no has hecho deporte en tu vida o hace mucho que no lo haces te es difícil, incluso te puedes sentir ridículo. En estos momentos es donde debes aplicar tu espíritu de sacrificio y superación. Debes luchar, debes soportar la presión, debes superar esos miedos y esas incapacidades que te hacen abandonar todas las cosas que quieres hacer, que querrías hacer. Los profesionales estiman este tiempo en dos o tres meses. Superado este tiempo, empezaran los efectos positivos, empezara a ser una necesidad para ti, y de repente, te sientes más seguro, empiezas a tener más confianza en ti mismo, empiezas a sentir que puedes conseguir los objetivos que te propones, pero no sólo en el deporte, sino en tu vida en general. Recuerda que lo que te proponemos es una vida mejor, no una vida cómoda.
Vamos, amigo, amiga, abandona tu seguridad, ese círculo de seguridad (falsa seguridad) que te coarta, que no te deja volar, que no te deja experimentar, que te hace renunciar…sin intentarlo siquiera. Aquí es donde el deporte te aporta experimentar con tus límites, el cuerpo ya no puede más pero tú sigues, la mente puede más. Debes llevar el cuerpo al agotamiento para empezar a entrenar tu mente, a sentir que puedes vencer tus miedos, tu dolor, tus inseguridades. De repente, otra vez, te empiezas a sentir fuerte, a sentir seguridad en ti mismo y a ver que alcanzas objetivos que jamás te hubieses imaginado. ¿Por qué la gente escala montañas? ¿Por qué la gente explora? ¿Por qué la gente investiga? ¿Por qué la gente crea empresas? Son personas que no se conforman, que luchan por sus sueños y por sus ideales y que han sabido salir de su círculo de seguridad y exploraron sus límites y sus fronteras. Explora tus límites con el deporte y veras que pronto empiezas a hacerlo en tu vida. Nunca renuncies a tus sueños.
Resumamos, hacer deporte nos dará más confianza en nosotros mismos, nos dará más seguridad, seremos más disciplinados y con más capacidad de sufrimiento y superación. Nos ayudará a explorar nuestros límites y por lo tanto a nuestra capacidad para luchar y no conformarnos. Rebajará nuestras tensiones y nos hará ver una vida mejor (la liberación de endorfinas al hacer deporte es muy beneficiosa y gratificante). Entramos en el círculo virtuoso, pues si nos sentimos así, nos gustará cuidarnos, alimentarnos mejor y como nos sentiremos mejor, nuestras relaciones personales mejoraran y nuestra capacidad de trabajo aumentará. Y de repente, tendremos una vida de más calidad y la sabremos vivir más intensamente. Seremos más felices.

José Manuel Vélez Parejo

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