Coges la última frase y me regalas un (micro)texto? III
Maria
Coge la última frase del último texto publicado y escribe tu texto.
Chic@s, el post anterior ha dejado de funcionar por alguna causa. Abro este nuevo y seguimos funcionando como siempre. Bienvenidos 😊😊
REGLAS DE PARTICIPACIÓN: el propósito es descubrir y disfrutar de gente que comparte el gusto por la escritura.
- Se trata de coger la ÚLTIMA FRASE DEL ÚLTIMO TEXTO (a modo de título/tema) y empezar con ella un nuevo texto en prosa o verso.
- Para evitar el síndrome de la página en blanco y/o pánico escénico, os pido por favor que NO CRITIQUEIS LOS ESCRITOS. Si os gusta algún texto y queréis haceselo saber al autor, escribid un simple comentario con su nombre y un (+1) y si no, dejadlo estar. No es un juego de a ver quien lo hace mejor ni de vamos a cargarnos al peor.
- Se borrarán los comentarios con críticas,opiniones, etc que no se atengan a lo descrito.
- Se borrarán los textos que no sigan la cadena -ultima frase del post anterior, primera parte del nuevo texto.
- Procuraremos textos de un máximo de 7 renglones (sin contar la frase de inicio).
- Si aún así, algún autor desea crítica CONSTRUCTIVA, que escriba "se puede criticar" antes del título. La crítica se hará directamente por correo interno al autor
- Si entre los textos surge algún TEMA QUE QUERAIS DEBATIR, hacédmelo saber y abro un hilo de debate, así nos vamos conociendo e interactuando de manera constructiva.
Ah! de la vida!. No hay nadie? ( Soneto de Quevedo)
Me alegro de volver a saber de ti María ☺️
13/01/2022
Bienvenidos, bien venidos, bien si nos hemos ido, mejor si nos quedamos y nos presentamos. Hola , soy Jaime, "breveRSERO" aficionado. Gracias María por reto mar este grupo tan (micro)fono abierto, divertido y creativo.
Un saludo para todos. Y gracias María, por proporcionamos el "papel" donde escribimos nuestras cosas.
14/01/2022
Su mente volaba imaginando quien la harinearía a ella, quien sería la persona con la cual compartir su sueño.
Poco a poco se fue dando cuenta que eso solo eran fantasías tontas. Pero por
14/01/2022
Porque no un día su príncipe azul la hiciera ser su masa y dejara de ser esa monótona relación que ha perdido su encanto ... .
14/01/2022
Rosalind, quienes te conocieron decían que eras una mujer de fuerte personalidad y un gran encanto. ¿Cómo no tener personalidad en un mundo dominado por hombres y en el que querías hacerte un hueco?.
Fuiste durante décadas casi una desconocida y sé que ya no lo eres. No me importa; este es mi pequeño homenaje.
Naciste en Londres el 25 de julio de 1920, en el seno de una familia adinerada. En 1941 te graduaste por la Universidad de Cambridge en Física, Química y Matemáticas. Tras doctorarte, viajaste a París donde estuviste desde 1947 a 1950, en el Laboratorie de Services Chimiques de l"Etat. Allí se ampliaron tus conocimientos en la técnica de difracción de rayos X. La cristalografía entró definitivamente en tu vida, te abrió las puertas del Panteón y, paradójicamente, selló tu destino.
¿Por qué te expusiste a las radiaciones? ¿Por qué nada ni nadie se interpuso en tu camino? ¿No te dabas cuenta que más tarde ibas a intentar arrancar a los dioses uno de sus mayores secretos?
El año de 1951 fue el de tu regreso a Inglaterra para trabajar como investigadora en el King"s College de Londres. Demasiado se ha dicho sobre las complejas relaciones, y los comportamientos poco éticos, de señores como John Randall, Maurice Wilkins, James Watson y Francis Crick. Allí realizaste excelentes imágenes de difracción del ADN-B. Como años más tarde Watson y Crick reconocieron, tu famosa Fotografía 51 resultó ser su más sólida base para en 1953 revelar la estructura molecular del ADN.
El 16 de abril de 1958, con 37 años, te marchaste para siempre. Es muy probable que tus prolongadas exposiciones a la radiación fueran la causa. Los dioses te cerraron el Panteón en el umbral, y el mundo se quedó sin una excepcional científica. Tu lugar estaba al lado de Watson y Click, compartiendo en 1962 el Premio Nobel de Medicina y Fisiología. No pudo ser: hacía tiempo que se habían decretado unos planes muy distintos.
En memoria a Rosalind Franklin
14/01/2022
La luz se fue apagando y ella se echo sobre la cama ,su luz se apago , no salía de esa oscuridad inmunda, su fortaleza, la hacia mirar hacia un rayo de sol que entraba por la ventana , diminuto, casi inapreciable pero , ese rayo era para ella algo, grande , algo que la hacia empezar a moverse sobre esa cama, llena de dolores , llena de angustias pero eso , eso insignificante la hacia poder levantarse , poder empezar a gritar y gritar al mundo.
Necesito vivir
14/01/2022
De su casa salió y de él también ..tomar las riendas del negocio familiar . Así es como Luis, informó a su padre tras presentarle su título flamante de ingeniero agrónomo.
Lleno de ideas y con la perspicacia que siempre le acompañó, visitó los olivares en una mañana soleada de mayo.No es que le resultaran desconocidos, porque durante las vacaciones de invierno recogía la cosecha y se encargaba de llevarla a la almazara para tener aceite durante todo el año.
El mismo lugar, los mismos árboles …pero distintos ojos. Ahora le tocaba volver a ver esos olivos que no habían sido desvaretados el año anterior y ponerlos a punto para dar aceitunas de nuevo sin que los tordos se las comieran antes.
De sol a sol en el mes de diciembre llegarían las manos para recogerlas y el olivar se llenaría de canciones, alegría y buenas migas.
Las primeras que cogían eran para el aliño . Su madre lo bordaba , daba gusto ver cómo las rajaba y añadía su receta secreta. Pero sus manos ya no tenían la misma seguridad que antaño por lo que Luis se la pidió para empezar un nuevo proyecto. Y aliñó y aliñó para llegar a los mejores paladares.
Hoy como con Luis en un restaurante de Madrid , es nuestro aniversario .Y en el plato pintado , junto al aliño, asoma un… Te amo.
15/01/2022
.Bésame, bésame sin medida. Pensaba esa niña mirando a su madre, mama bésame , bésame mucho , demuéstrame que me quieres mama. Pero esa niña se acostumbro a vivir sin esos besos, sin esas muestras de amor, pero la dañaba , la dañaba tanto que no entendía por que su mama , la persona que se suponía la tenia que amar mas que a nada en este mundo , no lo hacia y vivía con ello, con dolor , intentando una y otra vez que la quisiera.
Quisiera... que por las callejuelas del laberinto, entre el viento desventando las ventanas que cierran el paso a la luz. Que la lluvia primigenia empape la piel de la piel de todas las pieles humanas agarrando el hilo que es la vida.
Se busca método científico o corriente filosófica que confirme o desmienta que:
En los recovecos del dédalo, la verticalidad del ósculo es el siempre del horizonte.
16/01/2022
La verticalidad del ósculo es el siempre del horizonte… Juan lo tenía claro. Pero no le pasaba lo mismo a Guadalupe.
Siempre pensó en paradigmas que necesitaban ser cambiados y que el modelo de expansión líneal no encajaba en la idea de toroide que tenía sobre este universo. Incluso llegaba más lejos aún cuando le planteaba a Juan la posibilidad de la no existencia de esos respiraderos en otros lejanos.
-De la misma manera que tu corazón es un toroide energético.. otras formas de energía quizás no los necesiten pero que existen, estoy segura, porque ahí es donde todo se equilibra… contestaba ella ante la mirada atenta de él.
El escepticismo del hombre, chocaba de frente con la aparente claridad que manifestaba ella en sus afirmaciones.
-¿Y cuando nuestros átomos ya no formen parte de este mundo hasta lo mismo volvamos a coincidir porque ya no habrá ni recovecos, ni verticalidad?. ¿ Me quieres decir eso, Lupe?
- No hay nada imposible… Juan.
16/01/2022
La geografía, el descubrimiento de nuevos mundos eran su pasión...
10 de febrero de 1859. A bordo del clipper Lord of the Oceans.
-¡La penúltima ronda de ron ! ¡Ahora me toca servir!-- dijo alguien.
--No por hoy está bien. Mañana, el viento refresca y la mar enarbola. Esta noche me temo que toca rizar velas-- respondí.
--Nos toca ponerse a la capa o a palo seco -- terció nuestro viejo lobo de mar mientras ponía a buen recaudo su pipa.
Y en la anochecida de lo que, ignorante de mí, pensaba que iba a ser el final de un día se convirtió en el final de todo lo que había sido y conocido. Soplaron vientos de fuerza 11 en la Escala de Beaufort , en una noche de alquitrán y con las olas rompiendo sobre cubierta con inusitada fuerza;la Naturaleza estaba desatada. Nunca había visto a la mar tan desafiante, tan amenazadora, como si quisiera poner a prueba todo. Por primera vez una invisible tenaza se apoderó de mí. No sabía qué decisiones tomar, dejé de pensar con nitidez...
12 de febrero del año 1859 .
Toda la tripulación ha desaparecido. Soy el único superviviente. ¿Por qué yo? ¿Por qué han desaparecido tan excelentes marinos y compañeros? ¿Era acaso el mejor? No.
Veo a nuestro clipper encallado azotado por las olas y muy poco he podido rescatar todavía de él. Al menos la madera, las desgarradas velas y los cabos me pueden ayudar si dispusiera de alguna herramienta. En el interior la corriente entra por las numerosas brechas con mucha presión. Es muy peligroso bucear en tales condiciones y ni siquiera tengo fuerzas para intentarlo.
Su mente comenzó a divagar y el pasado regresó de nuevo.... Ana.... y mil y una preguntas en su mente y mil y una respuestas ,que no sabia si eran las correctas , pero a a pesar de ello Ana confiaba en un amor ,un amor que quizá no exista, ese amor tan puro, tan limpio tan pasional , tan generoso e indestructible, pero solo era un sueño de Ana , solo eso ,un sueño por que en fondo de su ser sabia , que ese amor jamás llegaría.
Con energías renovadas dio un carpetazo al pasado y feliz, cerró una puerta para siempre..... Nuevas ilusiones, nuevas esperanzas, una nueva vida , esa vida que ella quería tener , esa vida que nunca la dejaron tener. Y comenzó a reír de nuevo, comenzó a sociabilizar , comenzó a soñar , a soñar eso que jamás la permitieron, ser ella misma. Sus ilusiones , viajar , bailar, reír, sobre todo reír , por que para ella la risa eran gotas de felicidad que la llenaban el alma y el corazón. Reír y dejar de llorar , su sueño.
Sueño...incumplidos sueños, deseados sueños. Repentinamente, recordó a Shakespeare. Cogió un desvencijado libro y comenzó a leer...
" Sueño de una noche de verano "
" O, si había consonancia en la elección,
asediaban al amor enfermedad, guerra o muerte,
volviéndolo fugaz como un sonido,
veloz como una sombra, efímero cual sueño,
breve cual relámpago que, en la noche oscura,
alumbra en su arrebato cielo y tierra
y, antes que podamos decir «¡Mira!»,
lo devoran las fauces de las sombras.
Así de rápido perecen ilusiones."
El amor es una ilusión, la vida es una ilusión. Shakespeare tenía razón, pensó.
Tenía razón, pensó Guadalupe, Ana tenía razón: el futuro es
femenino
Y es que, mientras se le iban consumiendo los días, las
semanas y las estaciones de forma miserable, Guadalupe se hacía cada vez más consciente
de que —si quería vivir una vida digna de tal nombre— no tenía otra opción que
alejarse de los brazos de Juan. No es que ya no le quisiese —seguramente,
todavía se derretía al verlo—, sino que, más bien, se trataba de que había
dejado de ser aquella chiquilla ingenua con la cabeza llena de fantasías y ya
no esperaba a ningún príncipe azul ni de ningún otro color. Ahora, había
aprendido que el amor no correspondido es solo una cárcel disfrazada en la que
las ilusiones se marchitan sin que lleguen a florecer.
Ni toda su entrega como amante, ni la lencería que aún lucía
con encanto, ni las concesiones hechas a lo largo de los años, habían conseguido
centrar la atención de Juan y apartarlo del lado de aquellas mujeres que
aparecían y desaparecían —con las que no podía competir en edad ni, tal vez, en
atrevimiento—, y a las que odiaba con toda su alma.
Y es que Guadalupe —Lupita para los amigos— cada día
entendía menos aquel mundo, tal como iba surgiendo de las cenizas de la
pandemia. Pero, ella, a diferencia de su amigo Alejandro —al que todos llamaban
el Oscuro, en referencia a Heráclito—, que se planteaba inaccesibles dicotomías
filosóficas como aquella de “buscar la verticalidad del ósculo en los recovecos
del dédalo”, prefería circunscribirse a un horizonte mucho más limitado.
—Este mundo resurge como un ave, Félix —le había dicho a su
hermano— y a algunas nos pilla con el pie cambiado.
Y Félix, que siempre reía las gracias a su hermana, respondió:
—Muy ingeniosa, Lupita. Quizá solo se trate de acomodar de
nuevo el paso. Y ya sabes que te quiero, que eres mi favorita.
Porque él estaba allí para darle su apoyo y su calor cuando
ella lo necesitase y, también, para mover las caderas cuando todo fuese mal,
como decía la vieja canción ochentera que aún recordaba.
Pero eso a Guadalupe, en su tristeza, no le bastaba. Y,
aunque añoraba un pasado en el —quizá— fue feliz, ahora, desengañada, sólo deseaba
escribir una página brillante en su futuro, en la que pudiese expresar su
propia individualidad.
Ella quería ser como su amiga Ana, que ya volaba sola, con
paso firme. O como Lucía, que —ejemplo de valentía— se había marchado al cuerno
de África, para realizar su sueño de atender como médico a quienes más lo
necesitaban. O como Jim —la precursora—, que no había tenido miedo de vivir el
amor a tres bandas.
Porque, en el nuevo mundo, ya no se trataba de que algunas
mujeres importantes se hubiesen hecho un hueco en un universo dominado por los
hombres, sino que, ahora, cualquier mujer era importante. Porque había surgido
un nuevo tipo de mujer, que no estaba dispuesta a anularse en nombre del amor
—ni en ningún otro nombre— ni a ser la media naranja de nadie, ni a resignarse
a llevar una vida invisible, siempre a la sombra del guerrero.
Y es que, por donde quiera que mirase —como si un meteorito
silencioso las hubiera extinguido—, ya no veía mujeres dependientes, de
aquellas que —como ella— sufrían las cadenas de amores posesivos, de amores
tóxicos que cercenaban sus sueños.
Y se preguntaba en silencio por qué a ella le estaba
costando tanto salir de aquella fantasmagórica prisión, que estaba acabando con
su esencia. Aun así, le quedaban fuerzas para resistir y se decía a sí misma
que estaba reuniendo el valor necesario para dar el paso que sabía que
necesitaba.
—Lo haré. Aún hay esperanza para mí, porque la esperanza es
lo último que se pierde, Estrella Galicia —dijo, en un susurro, dirigiéndose a
su perrita pekinesa.
*Nota* debido a un error del editor el texto de Shakespeare se ve con un tamaño tres veces mayor. Mi intención era sólo resaltarlo en negrita sin cambiar el tamaño ni la fuente. Y una vez publicado ya no lo puedo anular:(
17/01/2022
Lo mejor siempre esta por llegar pero que larga es la espera y que dura la travesía. Ya no quedan mas ratas en este barco todas han abandonado, familia, amigos ....Ahora es un tiempo nuevo un tiempo de esperanza, de paz interior que te hace ver las cosas claras, de mirar al frente y olvidar el pasado.
Ese pasado que de vez en cuando te recuerda.....
17/01/2022
Ese pasado que, de vez en cuando, te recuerda lo que echas de menos el sur.Pensaba para sus adentros una mañana fría de enero de Madrid.
Cinco años de su primera infancia pasó Lucía en un pueblo costero andaluz. Llegó cuando apenas sabía hablar y no le tenía especial cariño a la playa , sobre todo porque tiritaba cuando entraba. Todavía recuerda como con sus piececitos, buscaba coquinas en la arena con su madre y cómo se iban los tres a comer pescado al puerto ,recién salido de la lonja..
Su lengua de trapo incorporó el acento rápidamente y su cuerpecillo los primeros pases de fandangos , especialmente .Pero ella se quedaba embobada con las bulerías.
La marisma en mayo era todo un espectáculo.. flamencos , águilas, ánades…. Bailaban entre agua , cielo y tierra , entre enebros, alcornoques , pinos y romero para regalar a Lucía música para sus oídos .. imágenes para su retina y olores para su memoria.
Fue ese día, ese… donde escuchó por primera vez la palabra duende… Y hoy es cuando entiende el significado……
17/01/2022
—Lucía vivía con ese
cura que se quejaba de estar enfermo y que ¡imagínate! nunca la había tocado —dijo
Lucas, famoso por no seguir las reglas e interpretar siempre las cosas a su
manera, de tal modo que parecía que lo que decía era lo mismo, pero, en realidad, no era lo
mismo
—Lucas, dejemos por ahora
a Lucía a un lado y centrémonos en algo más importante. Yo creo que deberías
respetar mínimamente las reglas de la casa de María, porque, si existen unas
normas de hospitalidad que debe respetar el anfitrión, no te quepa duda de que
también las hay para los huéspedes. Y, si no lo haces así, cualquier día te va a salir
por Chiquito de la Calzada —respondió Estrella, tan directa como siempre,
recordando que hacía poco alguien con insomnio ya había dicho algo parecido.
—¿Qué frase, niña?
Estrella, que en sus
mejores sueños no pudo imaginar nunca que pudiesen dejarle la respuesta tan a
huevo, dijo, con la entonación pertinente:
—¡Hasta luego,
Lucas!
¡Hasta luego, Lucas! dijo esa hija, hermana, tía, sobrina y madre ,.Hasta luego Lucas!! No mas, dijo, no mas dolor, no mas sufrimiento, no mas intentos .Hasta luego Lucas!!
Rota por dentro, rota por fuera con una hipersensibilidad que no soportaba , la hacia vulnerable, la hacia frágil .
Hasta luego Lucas !!! A esa vida infeliz.
Bienvenida Vida!! bienvenida a empezar a reír, a empezar a realizar eso que anteriormente no la dejaban, bienvenida vida!! Bienvenida a soñar, a sentir sin miedo a dar todo aquello que lleva dentro .
Hasta luego Lucas, bienvenida vida!!
—Se han solapado, María, quito el mío —dijo, con reflejos y
educación, alguien a quien le pilló el toro del solape, una res que, en los
últimos tiempos, anda muy viva por estos lares, con tanto trasiego como,
afortunadamente, empieza a haber. Y todo el mundo admitió su sincera disculpa.
Lo dijo porque María Dédalo, la Guardiana de las Esencias
del Templo de la Pluma, intentando frenar algunos desmanes que empezaban a
producirse, había puntualizado, con muy buen criterio:
—La última frase, no la primera.
Y, enseguida, consciente de que cada uno va por libre,
añadió:
—Y, por favor, que nadie me malinterprete, que no he dicho “la
última frase no, la primera”.
Y, ya de paso, aprovechó para explicarnos —a riesgo de ser
cargante, pero siempre es mejor pasarse que no llegar— que lo de “la última
frase” se puede hacer de muchas maneras. Y expuso algunas:
—Se puede coger toda la frase tal cual, algo ideal para los
puristas. O una parte de la frase, algo que les cuadra bien a los que tienen su
propia idea de por donde debe ir la historia. O se puede poner literalmente la
frase, pero con un sentido diferente, indicado especialmente para los amantes
del ritmo y las sensaciones fuertes.
Y, como aún no se había quedado a gusto, todavía nos puso
otro ejemplo:
—Incluso, se puede hacer como algunos —de todo tiene la viña
del señor— que fusilan la frase como si fuese un slogan de El Corte Inglés, sin
ninguna conexión con el resto del escrito, demostrando, así, que ellos, si han
venido aquí, es para hablar de su libro. Pero, hasta este supuesto se ajusta a
la letra de lo requerido.
Y, aunque ella no lo dijo, ya sabemos que estaba pensando
que, lo que de ninguna manera se puede admitir, es modificar la parte de la
frase que tomamos para empezar.
Y, ya sabéis —para evitar solapamientos, como el que acaba
de ocurrir, que empiezan a ser frecuentes—, tomad esta precaución antes de publicar
un texto: refrescar la página, por si aparece algo que no estaba cuando
empezamos a escribir y que —dicho sea de paso— nos hará jurar en hebreo, por
tanto esfuerzo derrochado.
Y con esto y un bizcocho, solo puedo deciros para terminar
aquello de:
—Hasta luego, Lucas. Bienvenida, vida.
Susana, bonita, sin problemas. A veces alguien se nos adelanta con la misma frase y los textos se solapan. Leemos si ya hay otro texto con esa frase y sin problemas 😊😊
18/01/2022
" Pronto será primavera en la Tierra hablo para sí Donn pero él se se encontraba en uno de los lugares más desolados de Marte,Amazonis Planitia. En el subsuelo de aquella inmensa llanura se extraía el mineral del que dependia la Tierra para su consumo energénico. Pudo ver cómo un brazo articulado se acercaba lentamente a la nave hasta acoplarse a la escotilla de salida. Deseaba quitarse el traje espacial y liberar la tensión que había soportando dándose una buena ducha. Echó una mirada , --- ¡qué desolación!, pensó. Se levantó y comenzó a dirigirse lentamente por el pasillo a la Living Unit. Los siete meses de ingravidez los notaba y sus movimientos eran lentos y torpes. La puerta de entrada se abrió y comenzó a familirializarse con su nuevo hogar. Antes de quitarse el traje se dirigió a Berta, la computadora I.A. que sería su mayor ayuda. Pulsó dos veces en el display desplegándose un teclado. Todavía conservaba en la Tierra una Olivetti con más de 70 años en la que le gustaba escribir siempre que conseguía papel y cinta en China Town, algo cada vez más difícil.
-- Hola Berta,cómo está todo?
-- Hola Donn estaba esperando tu llegada. Qué tal ha sido el viaje?, respondió.
-- La entrada en la atmósfera ha sido lo peor, estoy todavía muy tenso. Algún problema detectado?
-- En los satélites de comunicaciones pero no consigo hasta ahora saber cuál es la causa.
-- Serio?, tecleó Donn.
-- sí y extraño, pudo leer en el display.
-- y?
-- no es posible ningún tipo de comunicación en tiempo real con la Tierra.
-- Acabo de llegar y problemas, pensó.
-- record solo?
-- record solo.
Berta tiene razón es muy extraño que los tres satélites fallen, habló en voz baja para sí.
- Voy a darme una ducha, cenar y en una hora necesito que me preapares una sesión de grabación para enviarla a mi mujer. Me preocupa el problema en las comunicaciones, avísame por favor cuando sepas algo.
- ok lo haré, descansa.
El display se apagó y se dirigió a darse la primera ducha tras siete largos meses utilizando unas toallitas húmedas especiales. Mientras se duchaba le asaltó un alarmante e irracional pensamiento que desechó tan rápido como vino. No, no podía ser posible.
Cenó los alimentos rehidratados a los que tan acostumbrado estaba y se preparó para la sesión de grabación. La luz roja de la cámara se encendíó e intentó hablar con la mayor seguridad posible...
- "Hola Sally por un problema del que te habrán informado solo nos podemos comunicar mediante grabaciones. La temperatura exterior es extremadamente baja en este momento. No puedes llegar a imaginarte qué desolación existe. Una inmensa extensión de rocas cubiertas con óxido de hierro es lo único que veo alrededor. La previsión atmosférica anuncia una tormenta de polvo provocada por fuertes vientos para mañana; me temo que me espera mucho trabajo en la sala de control. ¿Qué tal te encuentras? ¿Y Caty?... se estará preguntando dónde estoy. Debo finalizar. Cuánto desearía que volviéramos a estar como antes. ¿Qué nos ha pasado?. Te echo mucho de menos. Cuídate "
Tras enviar la grabación se quedó muy pensativo....
*Nota* de nuevo el editor de textos , no hay forma de mostrar el relato como deseo hacerlo:((
19/01/2022
Se despertó sobresaltado de su sueño. cazar, cazar cazar.... fue su pesadilla durante la noche. Al alba recapacito y se preguntó una y mil veces cuantas veces había sido cazado.
Orgulloso, pensó a bote pronto !Nunca!! jjajajajaja. Soy el puto amo. Poco a poco se dio cuenta que el había sido abatido en todas sus cacerías y era presa fácil.
Era presa fácil. El venado corría veloz tratando de zafarse de sus perseguidores. Los árboles se le interponían rápidos, unos tras otros. Trataba de esquivarlos como podía. Apenas veía. A cada momento pensaba que chocaría. De pronto resbaló. El tiempo quedó en suspenso. Sus patas torpes no le respondían. Pensó que todo había terminado pero, lo siguió luchando.
19/01/2022
Pensó que todo había terminado, pero lo siguió luchando. A pesar de que ante ella abría solamente abismo, negrura, certidumbre de catástrofes y soledad, consiguió atrapar un pensamiento que paso fugaz por su cabeza. De repente había recordado aquel día en la playa de Zahora, cuando al salir del agua el sol la recorrió, recibiéndola amable en la arena, mientras caminaba hacia su toalla para extenderse en ella, ofreciéndose completamente al placer resentir sus rayos. Atrapó ese pensamiento, y cerró sus ojos mientras levantaba la cabeza, dirigiéndola hacia la compañía oscura de los últimos tiempos. La luz se quedó en sus ojos, sin traspasar sus párpados, y su mente giro hacia atrás, recordando otros muchos momentos luminosos.
La realidad de su existencia era la prueba más palpable de
que nadie está vencido mientras no acepte la derrota. Porque nuestro amigo Lo —apócope
de Lope— con la mirada fija en el horizonte y recordando otros muchos momentos
luminosos, sacó fuerzas de flaqueza y resurgió de sus cenizas. Pude apreciar
que, por un momento, le entró la duda y, quizá, pensó que todo había terminado,
pero, aún así, no se arredró y siguió luchando, contra viento y marea, y también
esta vez consiguió salir airoso de aquel envite, como había hecho muchas veces
en su vida.
Lo era un ejemplo para todos, pues siempre continuaba la
lucha hasta vencer o morir. Con tesón, con fortaleza, con determinación, buscaba
cualquier resquicio en el flanco enemigo y hallaba una solución que hacía que la
balanza se inclinase a su favor. Ya había vencido en cientos batallas en las
que aparentemente no tenía ninguna posibilidad. Y yo había sido testigo de
muchas de ellas. Nunca olvidé aquellas palabras que me dijo tras una victoria
increíble: “recuerda, Alvar, que el éxito solo es un fracaso que hemos tenido
la valentía de no aceptar”.
Y, ahora, se había propuesto conquistar el amor de Amanda —aquella
muchacha de los ojos tristes y el corazón herido que trabajaba en la oficina
del Banco de San Carlos, allí mismo en la calle de los Tercos—, que estaba
considerada un caso perdido.
Casi nadie confiaba en que pudiese salir victorioso de esta
prueba. Quizá solo él… y yo, que temblé de emoción cuando observé como iniciaba
su rito ganador. Desde mi posición, pude ver perfectamente como se llevó las
manos a la espalda para dibujarse unas alas.
Se llevo las manos a la espalda para dibujarse unas alas... Y el Dios Eurus, fascinado por esa frágil mortal desafiando las gélidas aguas del embravecido Atlántico, cristalizó el deseo de la inconsciente Icaro. Sutilmente sopló sobre las gotas de agua salpicadas por el tembloroso cuerpo, hasta convertirlas en delicadas plumas de un niveo blanco que, abrazando la húmeda piel, acabaron conformando unas hermosas alas. // Concedido el don … ¿o la maldición?
La que debe ser amada ya no se encuentra entre nosotros. La puedes buscar entre los bordes costeros, pero no la hallarás. Puedes intentar dar con su paradero en los bosques milenarios, pero también será infructuoso. Tal vez puedas dar con ella en el inframundo, pero no es un viaje sencillo ni el resultado fiable. Solo te quedará probar en el espacio sideral, pero ese sería un viaje sin retorno.
20/01/2022
Pero ese sería un viaje sin retorno.
Cuantas veces pensó en ese viaje sin retorno, cuantas veces quería ir allí, cuantas veces lloro con ese viaje.
Siempre pensaba en el , pero en su interior mas profundo sabia que si hacia ese viaje dejaría mucho sufrimiento en el punto de partida , dejaría muchas preguntas sin poder ser contestadas, dejaría dolor. Pero a pesar de desearlo , no podía hacer ese viaje , aun deseándolo, aun pensando que seria el mejor viaje de su vida no podía viajar allí .
Lo hablaba con la gente de confianza y no les gustaba ese viaje , no entendían por que pensar en ese viaje , no soportaban la idea de que pudiera hacer ese viaje y a pesar de darles las explicaciones, seguían sin entender el porqué.
Quien eran los egoístas, aquellos que no querían que hiera ese viaje que la iba a ayudar a dejar un sufrimiento con el cual no podía más o quizá ella era la egoísta por pensar en ella y no ver las consecuencias?
- Ese viaje sin retorno , se quedaría en su lista de deseos, única y exclusivamente por no hacer sufrir a nadie.
Cogiendo un libro —para dejar volar su mente— empezó a leer.
Aquél fue el principio de una nueva vida. Porque después de
ese vino otro y, luego, otro, y así hasta que leyó los ciento cincuenta volúmenes
que había en la biblioteca del penal de Sing Sing, donde le habían recluido a
perpetuidad por unos cuantos asesinatos de mujeres indefensas, de los que él —sin
mucha convicción— negaba ser el autor. Todas habían sido asfixiadas —al haber
recibido un mortal “abrazo de oso”— mientras hacían el amor.
Página a página, libro a libro, su vocabulario se fue
expandiendo. Y, al poco tiempo, ya era capaz de hablar cinco minutos seguidos
sin mencionar las partes pudendas, lo que para aquel ser depravado constituyó
toda una marca.
Sin embargo, aquel ambiente, lo estaba matando. Ratas,
cucarachas, frío, reyertas entre reclusos, castigos aberrantes… todo contribuyó
a que su salud se resintiera y se volviese “vulnerable”.
Pero la vida siempre sorprende y, en las situaciones más
desesperadas, suele haber quien pesca en río revuelto. Porque, cuando la
epidemia de covid se descontroló, las autoridades federales del Estado de Nueva
York decidieron liberar a los presos vulnerables para evitar que la enfermedad
se cebase con ellos.
Y así fue como aquel descendiente de inmigrantes suecos
llamado Lars Karlsson, cuyo apodo era “Kram” —“abrazo”, en sueco— consiguió —pese
a su condena— ver la luz del sol en libertad antes de morir.
¡Libertad antes de morir! Me asfixio. No tengo espacio para rebullirme. Escribo ésto cómo puedo; peleando por cada pulsación. La mascarilla me axfisia. La variz de mi pierna palpita bajo la bota. Mantengo con el pasajero de al lado, un sordo pulso de codos. Quiero correr y ser libre. Quiero cruzar por dónde me apetezca. Quiero trepar por los árboles. Quiero, quiero, quiero... "Libertad antes de morir"
20/01/2022
Libertad antes de morir, morir para ser libre. Divina estaba lista. Había llegado el momento de matar a la mujer que vivía en ella, así es que decidió dejarla salir por última vez. Se colocó frente al espejo de su habitación, y le habló desde su yo auténtico con determinación. Mientras le contaba que nunca más sería la otra Divina, esperó verla aparecer en su reflejo, esperó la ira en sus ojos al intentar anularla, la mueca de desprecio en su boca por creer que podía con ella y escuchar la voz categorica que le daba órdenes. Pero la imagen que tenía delante sonreía.
20/01/2022
Donde me llevarás? A Serrano de compras?, al séptimo cielo?, a descubrir el mundo.? O quizás volverás a ser ese maravilloso ser que aparentas e intentarás embaucarme con tu linda sonrisa mientras cortas mis alas.
No hay respuesta otra vez , solo ese silencio sepulcral que me hace estremecer ´´´......
No hay respuesta otra vez , solo ese silencio sepulcral que me hace estremecer .Ese silencio, que me hace estremecer cada poro de mi ser, que me daña lo mas profundo de mi persona ,ese silencio sin saber porque , ese silencio a una madre que te dio la vida, que eres su vida, ese silencio que me hace estremecer y no se el por que, ese silencio que hace revolverme y sacar lo que no quería ver, ese silencio tan dañino, ese silencio frustrante, ese silencio decepcionante, ese silencio mortificante , ese silencio que me esta matando poco a poco, ese silencio que me ha hecho ver lo que ya sabia y no quería ver.
" se sintió estremecer. Había huido de una sociedad ficticia,desquiciada y desquiciante; de un matrimonio que se estaba hundiendo para encontrarse en tan inhóspito lugar.
Su innata seguridad comenzó a perderla al tiempo que numerosas dudas afloraron. La verdad que más tarde le revelaría Berta era que su destino querían sellarlo y con el de él el de ella. Sería así , pero las cargas de demolición y el protocolo con las claves secretas para activarlas estaban en su poder: Berta,la computadora IA se las había proporcionado . Todo el complejo automatizado minero quedaría destruido.
¿Tal vez sabía demasiado de lo que realmente ocurría en la Tierra? "
21/01/2022
Punto y final.
Con tan tajante frase, concluyó un debate que ni siquiera llegó
a alcanzar la categoría de debate pues, para debatir, hacen falta dos partes
que quieran exponer su punto de vista y que procuren entender el del oponente.
Y en aquella justa que había organizado el rey Arturo, no las había.
Y, cansado de leer peregrinos argumentos y de presenciar
farisaicas roturas de vestiduras, aquel caballero, de forma elegante, dio media
vuelta y renunció a participar en la ciénaga a la que se hubiese visto
arrastrado de haber persistido en su empeño.
Y recordando las sabias palabras que el hada Freya pronunciase
en el bosque de Sherwood —“nadie puede ofenderte, si tú no se lo permites”—
decidió que la única decisión que tomaría sería la de —en lo sucesivo— elegir
con mejor tino a las personas que se sentarían a su mesa. Y así, hizo saber a
la concurrencia que él ya no participaría en esas lides.
Aunque aquello igual podía ser un testamento que una carta
de presentación.
" Aunque aquello igual podía ser un testamento que una carta de presentación, en realidad lo era porque aquel brabucón de las letras más no de la espada , había cabado su propia tumba . Queriéndome enfrentarme a él acepte de aquel aspirante a caballero disfrazado de miserable hidalgo el duelo, pero cuan timorato y renacuajo, miró de soslayo, requirió su espada y no hubo nada.
Así que acostumbrado a tales lances desapareció para siempre campeando por sus fueros"
Echóse a andar el post donde , desde hacía poco tiempo, escribía Amelia. En este año notaba algo diferente pero aún así le agradaba leer todos y cada uno de los escritos que se publicaban en él frutos de las fantasías, vivencias u ocurrencias de quienes aportaban su granito de arena para que ella disfrutara con su lectura.
Amalia era una mujer improvisadora, tolerante y paciente. Sabía que hay decisiones que no eran suyas y que no le quedaba otra que aceptarlas. Pero detrás del teclado esperaba volver a leer microtextos que le hicieran sonreír y que la trasportaran , aunque fuese por un momento, a lugares mágicos o no tanto, a situaciones reales o no tanto… y al mundo de las letras… de donde salen y han salido grandes ideas siempre.
Todo cambia .. y recordando a José Luis Cuerda en Amanece que no es poco se decía , esperanzada... Todos somos contingentes, pero tú eres necesario.
22/01/2022
Todos somos contingentes, pero tú eres necesario .
Exactamente es lo que decían mis seres queridos, eres necesaria, ni se te ocurra desistir de buscar tu felicidad, tus momentos , tu equilibrio, tus sueños que es tu momento, eres necesaria me decían, sin ti no podríamos reír como reímos, contar chismes como lo hacemos , esas confidencias , esos cafés largos e interminables, esas noches debajo de la manta , tu eres necesaria , me decían mis amores.
Tú eres necesaria, me decían mis amores. No sabían que el estar a mi lado conllevaba no ser exclusivo, aunque yo jugaba a dejarles sentirse el centro de mi mundo. No sabían que cuando yo les daba su espacio, su tiempo, lo que hacía era preservar el mío. Todos fueron prescindibles, a todos los sustituí, cuándo dejaron de sorprenderme, por sensaciones nuevas. Lo que yo no sabía era que la sensación más extraordinaria estaba por llegar, descolocando mi organizado universo.
22/01/2022
Descolocando mi organizado universo llegó mi " soledad” . No era la primera vez que me visitaba.. porque unas veces entre risas y otras entre lágrimas, ella y yo nos hicimos compañía durante largos y amargos días. Pero ahora, ha llegado para quedarse aunque ella insiste en que se volverá a ir.
Ella me entiende , me cuida y regaña.. creo que nos necesitamos la una a la otra.No tengo prisa ninguna en que se vaya porque , si eso pasa, volveré a llamarla aunque sea una vez por semana.
23/01/2022
Volveré a llamarla aunque sea una vez por semana.
La llamaba a diario, le contaba mis cosas, mis sueños, mis problemas .Esperaba de ella ánimos , entendimiento , empatía .Solo recibía charlas, enfados y me desanimaba a realizar mis objetivos. Pero seguía llamando a diario, no podía dejar de llamar, la quería tanto que veía imposible no llamarla a diario. Con el paso de los año y llamadas diarias, llamadas decepcionantes, llamadas frustrantes, llamadas de muchas lagrimas tras colgar el teléfono, pase a llamarla una ve por semana , entonces empezaron las recriminaciones de que no la llamaba, la sensación de sentirme culpable de no llamar mas, pero no podía dejar que me hundiera , paso tiempo y las llamadas seguían siendo una vez en semana y mas de los mismo, discusiones, acusaciones , tormento para mi corazón.
Deje de llamarla para siempre.
Ese que he tenido que sustituir por tí. Habíamos llegado a un acuerdo, pero no cumplió. Por eso espero que tú respetes el contrato. No tolero fallos, así que aplícate porque si no estoy satisfecha, no te pago.
23/01/2022
No te pago... Casi gritó al decir ésto. Le temblaban las manos, el corazón le iba a mil. Se jugaba mucho en esta empresa. El más mínimo fallo le reportaba semanas, meses, años de reproche. Claro, le decían, con esa cara de tonta cómo no te van a engañar. Claro, añadían, hacen contigo lo que quieren. Un día, otro día. Un mes, otro mes. Y al final los reproches se convertían en las cuerdas de una red en la que vivía inmóvil, atrapada como un animal. Un animal agresivo, un animal atemorizado y desconfiado que ya no distingue la mano que se acerca para darle una caricia.
24/01/2022
La mano que se acercaba para darle una caricia era desconocido, pero olía bien, y el dueño de la mano le transmitía confianza. Bule era una perra guardiana, y por lo tanto desconfiada. Una mastina con una boca babeante tremenda y un ladrido ronco, rotundo, amenazante. Pero el olor de aquel desconocido le era familiar, y se dejó acariciar, confiada, mientras su dueña se acercaba a ellos emanando el mismo color que el desconocido.
24/01/2022
el mismo olor que el desconocido, ese gran desconocido que se cruzo conmigo aquella mañana en la pasarela de aquel transatlántico, me miro directa a los ojos y esa mirada me atravesó todo mi ser, esa sonrisa que me regalo, hizo que mí corazón palpita de manera irracional, ese olor me se incrustó en mi via respiratoria llegando a el cerebro y que hacia que cerrara los ojos y lo oliera de continuo.
Y mi gran pregunta era ? eso es flechazo, enamoramiento
No se si volvería a ver a ese hombre , pero lo que si sabia que me dejaría marcada de por vida.
25/01/2022
Miedos atroces torturaban los sueños infantiles de Noé. Cada noche, antes de acostarse, miraba debajo de la cama; dentro del armario; en la estantería... Y cada noche, siempre a la misma hora, aquel ruido que le despertaba y le hacía estremecer...
25/01/2022
aquel ruido que le despertaba y le hacía estremecer...
Candela estaba plácidamente en su cama , en un sueño profundo , descansando de un día duro.
De repente la despertó un ruido que la hizo estremecer.
Era un ruido rítmico , se incorporo en su cama y sintió pánico, pensaba que estaban golpeando la puerta de entrad de su casa, que estaban intentando entrar en su casa , ella sola con sus hijos sintió mucho miedo.
No sabia que hacer , si salir a ver que ocurría o permaneces en la cama junto a sus hijos.
De repente ese ruido fue aflojando, Candela quieta casi sin respirar muerta de miedo , fue relajándose por que ese ruido iba desapareciendo.
Cuando paso del todo se dio cuenta que fue ese ruido rítmico rápido y después mas despacio hasta desaparecer.
Había sido los latidos acelerados de su propio CORAZON.
Había sido los latidos acelerados de su propio corazón y no pasos como creyó haber oído. Que extraño lugar era ese en el que había entrado, una mezcla de museo privado y biblioteca. Los miles de tonos adornaban las paredes mientras que las urnas de cristal sobre pies de madera noble presidían la sala en el centro. Las cortinas raidas le daban un aspecto tétrico y el polvo acumulado daban fé del abandono...
26/01/2022
¿Quién sería aquella gente? Durante toda la noche le habían acompañado en sus sueños, en una inquietante aventura en la que corrían todos juntos, huyendo claramente de algo. El iba en medio, protegido por todos aquellos desconocidos, de los seres extraños, siniestros, armados y amenazantes, que intentaban cortarles el paso. De repente, los que corrían delante de él cayeron al suelo, y y se encontró cara a cara con un rostro demoníaco. Entonces despertó, sudoroso, extenuado, asustado. En la lucidez y la soledad de su despertar, sintió la presencia y la opresión de la amenaza soñada.
27/01/2022
En la lucidez y la soledad de su despertar, sintió la presencia y la opresión de la amenaza soñada. ¿Quien había abierto la puerta de su habitación si ella recordaba haberla cerrado antes de acostarse? Temblorosa y muerta de frío se puso en pie y salió de la habitación. Bajó por las escaleras y lo que encontró le heló el alma . Todos los cajones de la casa estaban abiertos, en el sinfonier de la entrada, en el salón y en la cocina, pero lo que le produjo un escalofrío hasta la médula fue otra cosa. Todos los muebles del salón estaban cambiados de sitio. Quizás no había sido una buena idea comprar aquella casa solitaria...
27/01/2022
Reciclarse —dejar de ser quien era para llegar a convertirse
en quien quería ser— fue la hazaña más difícil que Christian realizó durante su
vida. Y es que, con una energía inagotable, aquel hombre pequeño —pero perseverante—se
entretuvo en desandar esa senda aprendida por los seres humanos durante generaciones,
que todos sus congéneres seguían sin rechistar.
Y, sin previo aviso, ante el asombro de todos, Christian comenzó
a transitar por un camino virgen, incierto, misterioso y lleno de peligros, en
el que únicamente se alimentaba de la certeza de que, en su final, encontraría
la ansiada recompensa, que justificaría todas las penurias sufridas en su búsqueda.
Y fue así como, recurriendo de forma permanente a su imaginación, a su
capacidad de improvisación y a su fe en sí mismo, consiguió llegar hasta la
tierra prometida.
Un día —observando el vuelo bajo de los buitres carroñeros—,
tuvo la certeza de que su camino terminaba allí. Y fue, entonces, cuando le fue
revelada la última y suprema verdad: no existía ningún premio al final del
recorrido, sino que el propio camino, recorrido como algo personal, exclusivo y
diferenciador, era la recompensa.
Alegrías y penas, que como un tesoro pirata, albergaba en sus húmedas entrañas. Secretos esperando ser descubiertos. Cantos de sirena. El dorado que pasaba desapercibido entre todos aquellos ojos incapaces de ver más allá de sus propias narices, de sus propios deseos y de sus miserias. Pero hubo un día en que un alma noble y generosa percibió una distorsión en las olas. Ésto es distinto; se dijo. Observó la superficie del agua, olisqueó el viento y, en su mente, sin ningún motivo aparente, comenzó a sonar la siguiente canción: "buenas noches, bienvenidos hijos del escriprock..."
Buenas noches, bienvenidos hijos del escriprock... Bautismo de muerte en vida y precipitación hacia otra estancia. Otro peldaño en la evolución de la octava generación de los hombres. Inicio del apostolado. Empieza la ruta de los viajes. El ascenso será largo y la estancia en la tierra indeterminada. Sólo el empeño y la vinculación entre los hombres hará posible el regreso. Segunda oportunidad de salvación para todas las generaciones de todas las épocas. Los elegidos serán los iniciadores. La esperanza se encuentra nuevamente en los corazones.
29/01/2022
"La esperanza se encuentra nuevamente en los corazones "... Esa frase que el padre Damián había soltado en la homilía aquella mañana seguía resonando en su cabeza, iba y venía y cada vez cobraba más y más importancia en su pensamiento. Durante esos 9 años había estado felizmente casada o eso creía ella, hasta que apareció en su vida Adrián. Como una balanza que se equilibra, a la vez que su matrimonio perdía fuelle día a día, él le proporcionaba lo que le faltaba con una pasión que ya tenía olvidada. Aun se estremecía pensando en su último encuentro, en como la devoraba el cuello mientras la sujetaba de las muñecas contra la pared, en como besaba cada centímetro de su cuerpo, en como le quitaba la ropa....Se descubrió a si misma mordiéndose el labio inferior mientras sufría un escalofrío de deseo.
30/01/2022
"Liberada de las absurdas páginas del libro que ella habitaba por obligación" kármica, ya que el mundo habría de llenarse de aquellos que fueron arbitrariamente arrancados de su misión. La decimoquinta generación saldría del caos. Los grupos se mezclarían y se reconocerían, recuperando así el cuerpo, el contacto con el cielo.
30/01/2022
El contacto con el cielo estaba en los planes de la generación número quince. Formada por humanos y replicantes de nueva tecnología siempre tuvo como objetivo poder habitar en satélites por conocer.
Los humanoides habían avanzado tanto que se aventuraron a colonizar Adrastea, una de las lunas interiores de Júpiter. Ni las mareas, ni su composición mayoritaria de hielo hicieron peligrar la misión que , tras contactar con la asamblea de sabios terrícolas, les había sido encomendada.
Entre los humanos que viajaron estaba Andrea, estudiosa de la civilización griega . Y Entre los replicantes , Blade. El mismo que años atrás compartió con ella su pasión por las estrellas.
30/01/2022
—Quien lo prueba, lo sabe —se decía Andrea, en un murmullo,
enrocada en su torre de marfil, atesorando su corazón magullado —que se negaba
a exponer de nuevo—, recreándose en su dolor, imaginando universos alternativos
que ya nunca alcanzaría y, sobre todo, añorando a quien una vez amó con todo su
ser, con toda su alma, con toda su ternura y que, perdido para siempre, vagaba
libre —sabría Dios en qué brazos— por aquel mundo que un día soñaron conquistar
juntos.
Al otro lado de la ventana, el astro rey derramaba su magia,
iluminando una espléndida mañana que ya nunca más sería suya; los pájaros se
afanaban en desgranar sus trinos, armoniosos cantos que antaño llenaron de
alegría su existencia.
Pero en aquel corazón —un corazón herido, desgastado,
vencido, humillado, que se dejaba morir de pena, buscando el descanso eterno como
un viejo elefante que sabe que su tiempo ha terminado— solo quedaba tristeza,
desconsuelo y, a veces, indiferencia.
Se enredaron en un beso largo y .... sintieron ,de nuevo ,esa conexión tan especial que les hacía tocar el cielo . Blade nunca soltó la mano de Andrea, por mucho que ella decidiera caminar sola algún tiempo.
Pero la vida, que es caprichosa, decidió unirlos de nuevo de una manera improvisada.
Ella no pensaba ni quería volver atrás porque cada vez que lo hacía ,no aprendía. Pero la ternura, la paciencia, el amor y el tiempo que Blade le regalaba a diario , derretían su memoria a la vez que multiplicaba emociones que creía olvidadas.
Y, de nuevo juntos…. Decidieron echar a andar….
31/01/2022
Decidieron echar a andar, cada uno cargado con su mochila, ambas llenas de una pesada carga. No sabía si podrían ir soltando lastre por el camino, si serían capaces de llegar a su destino livianos, vacíos. Solo sabían que tenían las ganas y la intención, así es que después de contemplar el largo camino que tenían por delante, de comprender podrían tropezar incluso el uno con el otro, de entender que en algún momento deberían cargar con el peso ajeno, se miraron, traspasando el umbral de sus miradas, asintieron, y comenzaron a caminar.
31/01/2022
Y comenzaron a caminar. sin saber cual seria su destino , solo caminaba , no quería mirar atrás, únicamente hacia delante , soltó mucho lastre antes de empezar ese camino, seria un nuevo camino lleno de alegrías. de esperanza y amor, sabia que no seria fácil , pero le fue algo fácil en su vida?.
Pero le fue algo fácil en su vida?. Recuerda que desde su más tierna infancia, la curiosidad por descubrir el mundo, le llevó a chocar en más de una ocasion con las reglas establecidas y marcadas. Nunca entendio y aún es el día que sigue sin entender, ese borreguismo prosélito en el que vive instalada más de la mitad de la humanidad. Ovejas se un rebaño desgastado en normas y leyes absurdas, caminos por los que transitar desgastados de tanto ir y venir, pastos en los que las briznas de hierba son el recuerdo del pasado glorioso de la categoría como res.
Pero el siempre tuvo un alma más de halcón, de definirse en las alturas, de escapar de lo mundano, de lo mezquino del día a día, de la globalización tan maravillosa y excitante que nos venden. De volar alto y observar la vida con otro ángulo, con otro prisma muy distinto, aunque eso lo llevará a ser diferente, distitnos al resto, el sabía e intuia que había nacido para ser diferente a todos, al resto.
—Se puso en marcha sin volver la vista atrás, siguiendo las
instrucciones de la misteriosa voz que, en sueños, le dijo: “cuando la ciudad sea
destruida, huye y no te dejes dominar por la curiosidad; evita a toda costa mirar
hacia atrás, porque, si lo haces, quedarás cautivo de lo que fuiste, como una
estatua de sal, y ya nunca podrás ser feliz en ningún sitio. Al levantar el
vuelo, siempre hay que hacerlo ligero de equipaje.”
Tras estas palabras, el profesor Miralles hizo una pausa y continuó:
—“Como los hijos de la mar”, habría añadido la voz, si
hubiese sido la del gran Antonio Machado. Y, queridos alumnos, ese es, según mi
interpretación, el origen de la leyenda de la estatua de sal que Moisés
describe en el Génesis.
El profesor volvió a su mesa, se sentó —para variar— y sacó
las conclusiones pertinentes:
—Y no olvidéis que esta es una lección de vida. Recordad que,
en un principio, la estatua de sal no era algo literal, sino tan solo un mito, una
forma impactante de representar lo que significan las ataduras del pasado. Pero…
puede que a Moisés se le fuese la mano…
Lentamente, lentamente se iba desnudando frente al espejo, lentamente se quitaba su ropa, despacio , con miedo, no sabia que se iba a encontrar, hacia mucho tiempo que no se veía desnuda , años , una vez desnuda fue mirándose desde arriba hacia abajo, su cara con mas arrugas, sus pechos mas caídos , su tripa, con muchas marcas , sus piernas mas flácidas . En resumen un cuerpo desgastado por el tiempo por las circunstancias.
Pero aun asi ella se veía preciosa.
02/02/2022
Ella se veía preciosa, distinta a todo y a todos. Era consciente del poder que alberga los años y las experiencias vividas. Cada una de sus cicatrices, cada uno de sus golpes, cada uno de aquellos pelos blancos que comenzaban a teñir su melena negra, le había traído hasta aquí, y le había convertido en aquel ser, que desde el minuto uno era imposible dejar de mirar y admirar. Su tono de voz, dulce, cálido, emotiivo. Sus manos suaves, delicadas. Esos ojos que se te metían hasta el alma, con la frescura de la primavera, albergando mil y un universos en perfecta consonancia y conjunción. Nada de ella pasaba desapercibido, y ella como mujer lo sabía. Atras habían quedado los años de inseguridad, de miedos, de frustración. Ahora sabía lo que valía, y que cada uno de sus pasos firmes la llevaba de camino a su destino, a ese objetivo claro y contundente. Nada ni nadie podía pararla, y nadie la iba a hacer cambiar de idea. Era ella frente y delante del mundo.
Era ella frente y delante del mundo... cuando contemplaba, fascinada, la belleza de Melque.
Hacía tiempo ya que esa joya visigótica le llamaba la atención.Tanto, tanto, tanto…que decidió visitarla.
Era un día de mayo , los montes lucían todo su esplendor alrededor de la ermita.. como diciendo a Paula lo que atesoraban y que estaba a punto de descubrir. Dos arroyos la rodeaban intentando recordar la importancia y la fuerza que siempre tuvo el agua.
Con su cámara fotografiaba una y otra vez el lugar . Nadie había y nadie la observaba.
La solemnidad del lugar se vio superada con el interior de lo que , antaño, fue un lugar monástico. La grandiosidad de sus muros sin ornamento y la majestuosidad de sus bóvedas y arcos dejaron a Paula maravillada.
Y en esas andaba , cuando... Mientras fotografiaba sintió una mano en su hombro. Apagó su cámara y mientras giraba la cabeza esuchó claramente......""" No temas, estás en casa """
Sin que supiera por qué, Moisés volvió a subir al Monte Sinaí,
el mágico lugar donde, mucho tiempo atrás, escuchase La Voz por primera vez. Aunque,
en aquella ocasión no le había parecido demasiado nítida, como si le llegase
con interferencias. Ahora, encontró el entorno tremendamente cambiado. Por
ejemplo, estaba seguro de que aquella antena 5G no estaba allí la última vez. Ni
las señales de tráfico advirtiendo de desprendimientos. Ni otras muchas cosas. Pero
no se dejó arredrar por la novedad y, con determinación —pese a su asombrosa
edad—, consiguió llegar hasta la cumbre. Allí, sacó un ordenador portátil de la
mochila, lo encendió y advirtió que tenía muy buena cobertura —las antenas 5G no
sólo provocan cáncer, también producen milagros como ese, que ríete tú de las
plagas del faraón—. A través de Google conectó con la web de la Cadena y en el
monitor apareció la cara de Jesús Vázquez. Entonces tuvo la seguridad de que,
de nuevo, escucharía La Voz en el monte Sinaí.
Tuvo la seguridad de que, de nuevo, escucharía La Voz en el monte Sinaí y por ir adelantando el trabajo Moisés decidió hacer una hoguera.
-Venga, a ver si te animas a hablar ya, que nos van a pillar, que aquí está prohibido hacer fuego y de las multas de la Guardia Civil no te libras ni tú-.
02/02/2022
Ocupa algo más de tu tiempo en leer, si no irás a la deriva por
el mundo —le había dicho su abuelo, años atrás.
Un consejo que cayó en saco roto, porque Paula solo tenía
una cosa en la cabeza: ir de fiesta y enrollarse con aquellos muchachos tan
atractivos que siempre estaban dispuestos a satisfacer sus más bajos instintos.
Y ahora, que había recibido un cruel castigo del que sólo podría liberarse cuando fuese capaz de descifrar la factura de la luz, bien que
lo lamentaba.
—Si me hubiesen puesto una tarea un poco más fácil, como…
por ejemplo… ganar una medalla olímpica o ir de invitado a El Hormiguero… o,
incluso, ser candidato en las elecciones de Corea del Norte… me esforzaría —dijo
Paula, mientras negaba con la cabeza, en señal de rendición—, pero, entender la
factura de la luz, imposible de los imposibles. Tengo que admitirlo: estoy desahuciada.
Tengo que admitirlo:estoy desahuciada. La noticia le había caído como un jarro de agua fría. Ella, con lo vitalista y enérgica que era, y la vida le devolvía el revés de un cáncer en estadio avanzado y con una esperanza de vida de apenas 3 meses. Pero lo tenía claro, allí sentada en aquel banco en la plaza de enfrente de la clínica: "Van a ser los mejores y más intensos meses de mi vida"
02/02/2022
"Van a ser los mejores y más intensos meses de mi vida”.
Ella sabía que tenía que tenía que
aprovecharlos,.
Sabía que era su última oportunidad y que sabría cómo hacerlo.
Primero se pondría en contacto con todas aquellas personas que pasaron
a lo largo de su vida dejándola cosas positivas y les diría todo
lo importante que fueron para ella, les diría que les quiere y que
jamás los olvidaría.
Después haría un pequeño viaje, no quizá el de sus sueños,
pero si un viaje, sola, asumiendo su situación.
Se había propuesto reír, siempre, reír y agradecer a la vida
los años vividos y las experiencias pasadas.
Tendría que convencer a sus hijos de que es ley de vida, que no pasa
nada que ella los había educado a ser independientes, y aun sabiendo que
iban a sufrir , ella quería que la vieran feliz , que su fin fuera feliz,
También perdonaría, perdonaría a aquellas personas que no
supieron hacerla feliz pero que no supieron hacerlo de otra manera.
Planearía ese día, ese día tenía que ser maravilloso, no
quería lágrimas, solo risas contar anécdotas y reír mucho,
quería abrazos entre todos los que estaban allí, quería ver que no se
iría sin que ellos vieran que se iba tranquila, orgullosa de todos
ellos.
Eso es lo que ella tenía pensado hacer.
Lo que ella tenía pensado hacer, lo primero, una vez que saliera del hospital y estuviese ya recuperada, era volver a aquella tabernilla de los soportales donde tan buenos ratos pasaron todos juntos y donde servían aquellos torreznos de Soria tan ricos.
03/02/2022
Al último animal de aquella macrogranja se le aprovecharon los torreznos, los mismos que tenía en un asador cerca de casa. Pero la sensación de saborearlos allí , hacían que recordara con nostalgia la magia que echaba de menos.
A María siempre le gustó la ciudad castellana. Pero en marzo y para celebrar el día de la poesía se aventuró a visitarla de nuevo. Muy cantada por poetas y Machado siempre presente en ella, contemplaba los álamos mientras paseaba hasta San Saturio. Desde allí, recordaba a Gerardo Diego en uno de los romances más preciosos dedicados al Duero.
“ Nadie a acompañarte baja….. Y entre los santos de piedra , y los álamos de magia.. pasas llevando en tus ondas…palabras de amor, palabras”
De nuevo visitó San Juan de Duero y el claustro de la concat.edral donde , sin gente, se quedaba parada mientras contemplaba los capiteles labrados por los canteros de la época .
Soria es siempre poesía murmuraba despacito.. poesía en piedra, poesía en agua, poesía y más poesía.
03/02/2022
Poesía que la transportaba a otros lugares, a otras épocas en las que era feliz. en las que nada era rutina. Épocas en las que su vida tenía sentido ahora solo tenía un pensamiento y viejos latinajos que cerca de los idus de marzo le recordaban.
Tempus fugit. Memento homo quia pulvis eris et a pulvis reverteris. ( El tiempo vuela. Recuerda honbre que polvo eres y en polvo te convertirás)
03/02/2022
Y obedientes jugábamos a eso y desobedientes salimos adelante, sin despilfarrar ánimo. La contención, una búsqueda incesante del camino de menor resistencia para dirigirnos hacia la meta oculta. Los vigilantes nos sacudían socarrones; todo marchaba bien para ellos, sin salirnos de la interminable fila, con el cuenco siempre vacío y los ojos anegados. Si silbar suponía una paliza que deparaba semanas de recuperación, nuestro paso era lánguido, bamboleante como el de una geisha famélica. Sonreíamos en escasas ocasiones, pero cada uno de esos momentos jalonaba el vacío hacia nuestras estrellas. El día que cayeron los muros nos encontró tiritando, grises de espanto y con las manos entumecidas, pero el corazón latía fuerte aún y la dicha explotó en todas direcciones. Sabía dulce y era añeja, como una conserva guardada con cariño.
04/02/2022
Como una conserva guardada con cariño, atesorabámos los recuerdos de un año pre- pandemia.
Nada volverá a ser como antes, decía una canción … pero estos años han sido y están siendo especialmente duros.
Ver como tus seres queridos, vecinos, paisanos y ciudadanos del mundo se van, luchan y sobreviven a duras penas.. está resultando una prueba de fuego sólo apta para mentes y cuerpos muy fuertes.
Resetear cuesta y más sabiendo que partes de un pasado tan inmediato ,que resulta hasta paradójico pensar que puedes conseguir parte de lo que has perdido.
¡¡Desesperanza ,busca otros lares!!…. No te quiero en el guión de mi vida.
04/02/2022
No te quiero en el guión de mi vida, le susurró al oído, mientras todas aquellas olas traían a su recuerdo todos los momentos mágicos que habían vivido, en aquella maravillosas playas; haciendose cómplices en cada uno de los momentos, en cada una de las caricias, de las risas. Cada uno de los sueños, de los anhelos, cada situación creada por ambos, les hacía sincronizarse, conectar de una manera diferente a todo lo anteriormente vivido.
No te quiero en el guión de mi vida, porque eres parte de ella. Nada, ni nadie jamás se ha metido en mi vida así. Eres todo aquello que he buscado a lo largo de mis días, y por fin en ti se hace realidad. No te pido nada, no te éxigo nada, porque por fin he entendido que amar, que querer es algo muy distinto a todo lo que he vivido hasta ahora. Por fin he descubierto de que va eso de querer, de amar. Del mismo modo que el mar no retiene a sus olas, y con condescendencia suscita su esencia para convertirse en nubes, del mismo modo he entendido que esto va de dejarse llevar, de no retener, de compartir, de formar un equipo. Atras han quedado los cuentos de hadas, las películas que Disney que tanto han marcado de una manera partidista y errónea la ideología sobre todo esto. Te veo, te siento y eso es lo único que de verdad importa y con ello me quiero y desde ese amor te quiero a ti.
A medida que sus palabras calaban en el, el sol conforma un maravilloso atardecer con el que sellar aquel anodino momento, que el universo creaba junto a ellos dos. Nunca antes habían sentido todó aquello, jamás habían percibido todo aquello mucho más allá, del deseo, de la química, del encuentro. Sentian que sus almas eran una, y que llevaban muchas vidas antes buscandose.
Se conocían desde siempre y en cada una de sus miradas sentían la fuerza y a la vez el liviano devenir de las olas.
Te veo, te siento... SIEMPRE
Siempre que se juntaban, hacían un corrillo y comentaban sus
experiencias.
Empezó hablando el de la derecha, que dijo:
—No tengo ninguna duda, nunca encontraremos un país tan
acogedor como España.
Y todos estuvieron de acuerdo. Pero, al ser España un país tan
variado, enseguida se pusieron de manifiesto algunas discrepancias. El de la
izquierda dijo:
—Pero, de toda la península, lo mejor es el norte. La
fluidez con la que se circula por el País Vasco y Navarra, no la hay en ningún sitio.
—Pues yo, en cambio, prefiero Cataluña —terció el del medio,
con ganas de buscar polémica—. Allí ni cuarentenas ni nada. Y esos balcones,
llenos de banderas, tan coloridos… da gusto verlos.
El de la derecha volvió a hablar y le lanzó un reproche:
—Si es que tú eres un romántico, no tienes remedio. Debes proceder
de una mutación extraña. En fin, podéis decir lo que queráis, pero… de Madrid
al cielo, Madrid es el paraíso de la libertad. A mí, jamás me han restringido
el acceso a ningún sitio. Nos ignoran, sí, pero nos dejan a nuestro aire. No
querréis que nos hagan la ola…
Y así, tal como había empezado, terminó el breve diálogo y
los tres volvieron a su ocupación, a hacer aquello que mejor hacían y que
llevaban en su esencia: replicarse. Pues ese —y no otro— era el propósito fundamental
de cualquier coronavirus que se preciase.
Coronavirus, que se preciase!! Y cómo lo hacía. Se preciaba con la falsa confianza del que siempre se ha creído menos, pero... ¡Qué maravilloso y entregado loco! Aquí tengo todo, no sé porqué me complicó; eso me dijo un día sin disimulo durante el confinamiento en una de sus llamadas. Sin vergüenza, sin pensar. Ahora estoy tumbada en el sofá. La gata maulla para que la abran. Escucho la tele de la cocina y mi hermana hace la cena. Ahora lo entiendo. En este instante tengo todo.
04/02/2022
En este instante tengo todo lo que nunca pensé llegar a tener. La vida, siempre imprevisible, me hace entrar en mi nuevo hogar, el de una paz siempre soñada, aunque pocas veces conseguida. Un hogar que parecía desahuciado y, que actualmente resplandece, repleto de estancias hasta ahora desconocidas, que exploro cada día, ansioso, cual niño rebusca en los armarios su regalo del día de Reyes en la víspera...
Ella apareció de la nada y sólo me sopló en la cara dos palabras, que no esperaba y me dejó recorriendo en un sueño perpetuo las calles de La Rochelle... Parecía sólo una brisa, pero resultó ser un viento abrumador, el Sazoco, del que hoy, años después sigo dando fe de su existencia, cuando miro embobado como Isabel duerme en su cuna, mientras Claudia me devuelve a la vida de nuevo, soplándome suavemente en los ojos una vez más...
04/02/2022
No se seguir, me decía a mi misma tantas veces, no quiero seguir también me repetía.
Había veces que mi agotamiento me paralizaba, como puedo seguir asi? me preguntaba, era una pregunta repetitiva que no se me iba de la cabeza una y otra vez.
Descansaba un tiempo , sola en mi mundo interno que pocos conocían, dejando me llevar por el tiempo y volvía a coger impulso nuevamente y me repetía .Tengo que seguir.
“Tengo que seguir”, me repetía. Pero la inspiración me había
abandonado y ya no sabía cómo continuar aquel relato.
Tenía que reformularlo todo, empezando por el estilo. Dejar
de escribir frases tan largas. Y no abusar de los participios y gerundios, que
se encadenaban unos con otros en una melodía sin fin, comprometiendo la fluidez
del texto.
En realidad —lo confieso—, lo que quería era escribir como mi
amigo Carlos. Y ser tan directo como él. Y dar a mis escritos la pausa y el
equilibrio que aquel titán de la escritura —tan ordenado, tan pulcro, tan
versado—, siempre conseguía, en cualquier escenario.
Un equilibrio y una pausa como los que debí dar a mi vida
cuando aún estaba a tiempo. Quizá entonces no tendría que imaginar cuál podía
haber sido el desenlace de nuestra historia.
Y, sobre todo, tengo que dejar de pensar en ti, la musa
ausente que late en cada palabra.
La musa ausente que late en cada palabra apareció aquel día de soslayo. Nada hacía presagiar su presencia. Tan sólo un leve cosquilleo de sus dedos mientras escribía y un perfume embriagador a pomelo blanco y mandarina que hacían de la estancia un lugar mágico para dejarse llevar.
Raúl, en su percepción, intuía que alguien conocido estaba presente. No quiso emocionarse pero las sensaciones que estaba viviendo, no le dejaban indiferente.
Las musas siempre son un regalo, un regalo que hay que pedir y desear para que acudan.A veces se materializan de la misma forma en que lo hacían las divinidades del Olimpo. Nada ni nadie, puede poner límite a la fantasía personal ni tampoco al torrente de colores que lleva una visita de esa calidad.
Y así.. una mañana en el Metro de Madrid .. Un olor a pomelo blanco y mandarina le hizo sentir que su musa no era tan lejana , ni estaba tan ausente como él pensaba…
05/02/2022
Tan ausente cómo él pensaba, siempre metida en su mundo. "Agarro el teléfono con dificultad. Me duele. Cabezona soy, por no pedir ayuda. Pero es que me exaspera. Esa lentitud, esa desgana. ¿Acaso no ve que estoy enferma? ¿Acaso no entiende lo que me cuesta pensar, organizar, hacer? ¿Acaso no ve lo que necesito?. Es como si lo hiciera a posta para que no le pida ayuda y luego, encima se ofende. ¡Pedazo de vago, no sé dónde tiene la sangre!" Y siempre tan ausente e impenetrable, aún no entiendo porqué se enfadaba, no entiendo porqué se marchó; yo siempre hacia lo que me decía.
05/02/2022
Yo siempre hacia lo que me decía , pero por que me sentía tan mal? Se suponía que lo que decia era lo mejor para mi, y yo hacia caso a lo que me decia, pero no, no era lo que yo quería , me dolía, me desgarraba hacia que mis sentimientos dejaran de existir , aun haciendo lo que me decia , quizá lo que me decia no era tan bueno como yo hubiera querido que fuera , quizá eso me perturbaba cada día , quizá yo misma era la que me dañaba pensando que si era lo que decia tenia que hacerlo ,
Y lo hacia y dolía.
05/02/2022
Tenía que hacerlo. Y lo hacía. Y dolía. Pero antes no era
así, sino todo lo contrario.
Evaristo Zas siempre había llevado una vida anodina y
tranquila. Era un hombre de orden, equilibrado y meticuloso, muy valorado en su
círculo social por su buen juicio y su predisposición a ayudar a quien lo
necesitase.
Asturiano de nacimiento, era un gran profesional que bordaba
su trabajo, hasta el punto de que llegó a ser uno de los sastres más conocidos
de la cuenca del río Sella.
Pero, su apática vida dio un vuelco cuando Constanza apareció
en ella y, penetrando su corazón —un músculo inexpugnable al que nadie hasta
entonces había tenido el más mínimo acceso—, puso punto y final a su sosegada
existencia.
Al principio, la relación fue idílica y Evaristo —el
equilibrado Evaristo— perdió el sentido por aquella mujer, que despertaba en él
una pasión desaforada. En cuanto olía su perfume de pomelo y mandarina, se
despertaba su lujuria, cual perro de Pavlov.
Pero no solo era pasión lo que sentía. Su amor llegó a ser tan
grande que lo trascendía todo. Entregándose sin reservas, cosiendo su futuro al
de ella y apostándolo todo a aquellas caderas que le hacían vibrar al son de
sus movimientos, su felicidad sólo pendía de un hilo: que ella nunca dejase de
corresponderle.
Tiene los barrotes muy gruesos. A pesar de que no puedo verlos, soy incapaz de traspasarlos. Una y otra vez lo intento, pero no puedo colarme entre ellos. Han creado una barrera mental, intangible, invisible, pero tan segura, tan consistente, como si esos barrotes fueron de la roca más dura. Todos hemos intentado traspasarla, a veces solos, a veces en grupo, a veces todos a una. Pero la barrera es tan sólida, que consigue mantenernos agrupados en tribus.
06/02/2022
Pero la barrera es tan sólida, que consigue mantenernos agrupados en tribus.
Anubis pensó que no, que no podía ser tan solida , que solo era querer , constancia e individualizarse, por que las tribus al final no la hacían bien. Poco a poco se fue separando de ellas , cada vez mas cerca de esa barrera, que según pasaba el tiempo ya no la veía solida.
Seguía con constancia día a día, con positividad y pensamientos de libertad.
Y llego el día en el que las barreras solidas , solo eran cortinas traspasables con mucha facilidad.
Con mucha facilidad, Evaristo había logrado el amor de
Constanza. Y, con la misma presteza, lo perdió.
Porque Constanza comenzó enseguida a sentirse prisionera en
la jaula de cristal que su marido había preparado para ella. Y es que, aquel
hombre solitario, acostumbrado a moverse entre maniquís, comenzó a tratarla
como si sólo fuese un muñeco sin alma, carente de deseos, desprovisto de una
vida propia que sacar adelante.
Y, sintiéndose por dentro como una reina esclavizada, Constanza
aprovechó el único resquicio de libertad que a duras penas había logrado conservar:
las cenas del viernes por la noche con sus amigas de siempre.
Así, el destino —caprichoso como es—, quiso que Constanza se
enamorase de un viajante de buena planta que visitaba con frecuencia la ciudad
y con el que coincidió varias veces en aquel restaurante donde semanalmente
acudía con sus amigas. Al principio, solo fueron miradas, guiños y palabras
intrascendentes, hasta que un día Ricardo —el viajante— se llevó el gato al
agua y logró enhebrar su aguja pecadora en la piel de Constanza, dejando para
siempre una marca indeleble en ella. La marcha de Constanza —que huyó con el
viajante— sería el principio del fin para Evaristo, que se derrumbó al verse
abandonado.
Fue un fin de semana muy revelador, un fin de semana que hacia tiempo que no experimentaba, con ganas pero con miedo.
Ese fin de semana añorado desde hacia mucho tiempo, soñado y magnificado .´Fin de semana intenso, agotador pero revelador.
Ese fin de semana me enseño, que puedo pero no como podía hace años , me revelo que ya no es igual, pero puede ser parecido menos intenso eso si, con medida , también me revelo que ya busco otras cosas , que ese fin de semana era como el pasado y el pasado no quiero repetirlo.
07/02/2022
"Repetirlo una y otra vez hasta que salga bien. Y después repetirlo las veces que sea necesario hasta que salga perfecto."
Esa era la primera y más importante regla en la escuela. Yo la he seguido, y no puedo decir que me haya ido mal, a lo largo de toda mi vida, hasta hoy.
07/02/2022
A lo largo de toda mi vida, hasta hoy, he tenido visiones. De niño me decían que era imaginativo, fantasioso, raro. "Calla, niño", me decía mi padre, al mismo tiempo que me daba un pescozón, si decía cosas como aquel día que encontramos a Paco, y le dije "si sales mañana de casa, te mueres". Yo volví a casa con el cogote caliente, pero a la mañana siguiente, cuando Paco cruzó la calle, un coche de atropelló levantándole por los aires, con tan mala suerte que al caer se desnucó. Desde entonces solo me llaman raro.
07/02/2022
Son tan normales, pensaba Luisa cuando sentada en la Terraza un
café de Madrid de la zona del barrio de salamanca, observaba pasar a la
gente. Son tan normales, vestidos prácticamente igual, con el mismo
peinado, con los maletines idénticos Van con esos aires de superioridad,
como si fuesen dioses, dioses en un mundo materialista y que únicamente buscaban,
dinero y poder. Son tan normales, cuando creen que todo se compra con
dinero, Luisa seguía observando y pensaba en que vida podrían llevar
cada uno de ellos. Aquel alto, moreno, con el traje gris y corbata azul
quizá tendría esposa e hijos , quizá su esposa fuera tan
normal como el , solo veían dinero cegados por el poder , quizá sin
sentimientos aparentes , desgraciados por que no se amaban , pero quedaba bien
mantener una presencia ante los demás de un matrimonio feliz,
Aquel otro, canoso, más bien bajito, qué vestía con traje negro y
corbata rosa , jamás se había casado, no tenía tiempo para
dedicárselo a nadie que no fuese a el mismo a su trabajo como ejecutivo de
una gran empresa de cosméticos, esa era su vida , nada más, cuentas llenas
de dinero pero sin vivir.
y así paso luisa la tarde ,imaginando vidas , con cierta tristeza de que
pudiera existir personas sin sentimientos, personas que no vivían,
personas que solo pensaban el tener, cosas materiales olvidándose de lo
que es vivir .
Luisa llego a una conclusión, quiero ser anormal, quiero, vivir, quiero
sentir el aire, el sol, los cantos mañaneros de los pajarillos.
Me siento afortunada, pensaba.
NO soy normal
En forma de lencería fina y como si se tratara de filigranas
bordadas, estaban labrados los pendientes y abalorios heredados de su abuela y que utilizaba en ocasiones especiales.Antaño bailaron al son de jotas extremeñas. Sin embargo, hogaño, lucierán con brío llevados por ella en carnaval.
Tan sólo una cosa la entristecía y era ver cómo su pantano mermaba. Esas aguas fueron testigos de sus primeros baños y rodeaban la montaña mágica del cerro Masatrigo.
Guadalupe había vivido ya restricciones de agua en los veranos, pero la juventud le hacía sentirlo como algo anecdótico. Acarrear agua desde la fuente con cántaros en la cabeza y brazos la dejaba sorprendida. Ella nunca fue capaz de hacerlo.
Pero sí sentía el vínculo con su tierra . Y hoy ante el espejo se ha propuesto, firmemente, volver …
09/02/2022
Murió extenuado de tanto luchar por una historia que sabia fracasada desde el principio. Había muerto para sus amigos, para sus seres queridos solo vivía por y para ella. había perdido su ilusión, sus ganas de luchar, en definitiva su visa Total ¿para que? se preguntaba.
Despertó y con la mañana decidió el cambio- ¿quizás los mendigos del día me acepten como compañero?. Dejo su móvil sus tarjetas de crédito, su vida pasada quería ser libre....
Dejo su móvil sus tarjetas de crédito, su vida pasada quería ser libre....
Que precio tiene la libertad? a que tienes que renunciar para sentirte libre ?
Dura decisión, cuando has pasado media vida no siéndolo, siguiendo normal marcadas por la sociedad por la educación,
Que ocurre para que te des cuenta de que no eres libre?
Sencillamente que no eres tu, no actúas como quieres realmente , estas sujeta a normas, líneas , conductas que quieres romper.
dura decisión, cuando has de dejar todo con lo que has malvivido, pero lo haces y lo haces convencida , segura , arriesgándote a estar sola , pero libre.
"Libre" ... Ese sensacíon era algo que había experimentado sólo dos o tres veces en su vida, hacía mucho tiempo, cuando era joven - se decía a sí mismo-.
Y, sin pensarlo, aquella mañana grisacea de abril cogió una pequeña mochila y salió a la calle: la cantimplora, un bocadillo de tortilla de patata con cebolla y una muda. "Está usted saliendo de la muy leal y noble Villa de Maricastaña".
12/02/2022
Maricastaña salió a la calle aquella mañana como hacía casi todos los días después de dejar terminadas sus faenas domésticas. Escuchar, mientras caminaba "encá su prima", las campanadas de las once en la torre de la iglesia se había convertido en parte de una rutina que no le desagradaba. Su querida prima María Sarmiento si, la que vivía en la calle De las Tres Botijas.
13/02/2022
La que vivía en la calle de las Tres Botijas se acercaba al río como cada mañana. Desde mozuela lo observaba atenta, serena y alegre porque sabía que le ofrecía todas las respuestas que buscaba .
Con el paso de los años los pajarillos que se acercaban a su orilla y los árboles de su ribera se convirtieron en compañeros del devenir de sus días.
Sofía sabía que si dejaba salir los pájaros de su cabeza .. se mimetizarían con el paisaje de una manera coral . Lo que, al principio, eran adagios , tornaban a presto cuando las corcheas de las aves añadían notas al compás.
A “La Botija” le gustaba trastear con un palo en el río. Si metía alegrías se reflejaban aunque no pasaba lo mismo cuando eran amarguras. Tanto se refractaban que asustaba un poco.
Pero una mañana de mayo, dejó de preguntar al palo y escuchar al río.."Fluye,Sofía, fluye…."
13/02/2022
La tercera expedición se puso en marcha. Partieron desde la puerta de la fortaleza dónde su especie vivía refugiada, dentro de una burbuja invisible, pero infranqueable, hacía miles de años, en la que habían conseguido crear su propio universo, cuando la humanidad empezó a volverse peligrosa para sí misma. El Gran Omega fue el artífice de aquella cúpula que les protegía de todo lo que dejaron en el exterior. Pero recientemente descubrieron una fisura en ella, irreparable desde dentro, peligrosa para su existencia. Las dos expediciones anteriores, enviadas por el Consejo de Sabios para localizar y reparar el peligro acechante, no habían vuelto.
14/02/2022
Omega III, nieto del noble y muy querido y llorado fundador de nuestra colonia, resultó ya desde niño muy cruel y tirano. Autoproclamado rey-burbuja, erigió por doquier estatuas de sí mismo que todos los ciudadanos debían alabar haciendo pompas de jabón, acuñó gran cantidad de monedas con su efigie que acaparó mayoritariamente para él y llegó a tanto su megalomanía que hasta hizo poner su nombre en los bricks de leche y en los envases de pescado.
15/02/2022
Recuerdos de tiempos mejores en los que era feliz, lo tenia todo en la vida.
Ahora se preguntaba si le merecía la pena seguir luchando, las ratas habían abandonado el barco y se encontraba ya exhausto de tanta luchar Al hur las ratas y descubrir su soledad se dio cuenta que tenía una rozón para seguir luchando y viviendo.
La razón no era precisamente la sed de venganza. tenía una motivación mucho mas fuerte.......
17/02/2022
El camino que buscaba no parecía estar a su alcance. Por más
que —a lo largo de toda su vida— lo buscase con ahínco, nunca logró encontrar
el verdadero amor —ese fabricado con los mimbres de la entrega y la generosidad—,
hallando, en su lugar, sólo grotescas caricaturas de él.
Así, Héctor —cuya única recompensa fue siempre la amarga
miel de la derrota—, se iba sintiendo decepcionado al contemplar cómo sus oleadas
de ilusión se estrellaban, sucesivamente, cada una a su tiempo, contra los
abruptos acantilados del desdén, en los que —emboscados— moran la traición y el
fracaso.
Pero, Héctor —pese a lo que su nombre pudiese sugerir—, no
era un héroe de la ancestral guerra de Troya. Ni tampoco un soldadito marinero,
aunque, como el del poema, él también se enfrentaba —en su enésimo fracaso— al
reto de olvidar a Mariela, aquella mujer fatal que tenía los ojos verdes y un
negocio entre las piernas.
Héctor era solo un hombre corriente al que, finalmente —aunque
de amor ya no se muere—, nada pudo impedir que —víctima de las cicatrices de sangrientas
heridas— se le partiese el corazón por la mitad, reventando sus endebles
costuras.
Y, ahora, solo, yermo y desolado —recluido en un sucio y
lóbrego asilo de beneficencia—, su vida languidecía como la llama mortecina de una
vela a punto de extinguirse.
Helena
era muy joven cuando se casó con Heinrich, un prusiano recién divorciado, que había
recalado en Grecia —la patria de Helena— y que ya frisaba los cincuenta.
Realmente,
la muchacha se llamaba Sophia, pero como su marido, un apasionado de la
arqueología —su sueño era encontrar la mítica Troya—, siempre la llamaba Helena,
decidió adoptarlo como si fuese su auténtico nombre.
Gracias
a la fortuna que él había amasado revendiendo polvo de oro, vivían de forma
desahogada e, incluso, lujosa; hasta que, un día, Heinrich decidió que era el
momento de convertir su sueño en realidad y emprendió camino a Asia Menor para
indagar acerca del emplazamiento de Troya.
La
expedición —aprovechando el trabajo previo realizado por Frank Calvert, a la
sazón, cónsul británico en los Dardanelos— comenzó a excavar en la colina de
Hisarlik, donde, finalmente, encontrarían las ruinas de la mítica ciudad griega.
Helena, que se sentía valiosa ayudando a su marido a clasificar los restos de
cerámica, soportaba las duras condiciones del trabajo de campo por esa mezcla
de amor y admiración que sentía hacia él.
Afortunadamente
—para Heinrich—, en 1872, aún no se había inventado el Cuerpo de Bomberos.
Con dulzura la peinaba , le cambiaba el pañal como hacía todas las mañanas y se aseguraba de conectarla a la máquina de oxígeno.
Doblegaba por sus múltiples goteras, Marisa siempre fue muy amada por su marido durante más de cincuenta años.
A pesar de que empezaban a aparecer los primeros despistes mentales, ellos dos se entendían a la perfección y hacían de su día a día un lugar lleno de amor.
Con dulzura fue amada, con dulzura fue cuidada y con dulzura se despidió de José.
Al darse la mano en su despedida, un olor a azucenas inundó
la estancia.. el mismo que percibe
él cada vez que ella le acaricia la cara con dulzura.
Sentido y sentimiento/graznido de la urraca/planeo de milano/el milano y los almendros/conejo que se asoma/tren que pasa volando/y bandada de jilgueros/mis botas en el terruño/mi nariz huele las flores/escucho el sonido del viento/el tren veloz que se aleja/la abeja liba el almendro/el sol deslumbra en el cielo/y vuelo con el milano/y bailo a merced del viento/y libo la flor del almendro/y me vuelvo primavera/y así renazco y desaparezco.
21/02/2022
Del hueco de tu abrazo to esperaba encontrar una tez calida y lo unico que encontre fue un pestazo a tabaco mezclado con olor a sobaco ,pense que pestoso el muy mamon cualquiera le toca la churrilla que seguro que la lleva impregnada del ma s denso requeson ,por favor ,por favor ,una mortadela pido que a este tio yo no lo toco ni aunque me lo mande el doctor .chimpon
22/02/2022
Había sido realizada con éxito la lobotomía que se le
practicó al último terrorista del lenguaje que había sido capturado. La
enfermera informó de ello a sus superiores y se marchó a casa con la
satisfacción del trabajo bien hecho.
En el reino de Trantor, las ofensas se castigaban
gravemente, pues las autoridades eran muy conscientes de que, a veces, una palabra
puede herir mucho más que un arma.
Y para la enfermera Chimpón realizar su trabajo, en ocasiones como aquella, era un auténtico placer.
Tomaron el coche de caballos que les llevo hasta el palacio de la opera. Allí descendieron y siguiendo su noche. su gran noche, se acomodaron en el palco que tenían reservado.las luces se apagan, se abre el telón, el director de orquesta levanta su batuta, suena la música.
Música que cada vez que la escuchas te hace estremecer ............
23/02/2022
Su destino... Ramón iba pensando si su destino sería realmente aquello,
cuando, casi sin darse cuenta, llegó a donde estaba el grupo.
—Llegas tarde, Ramón. Son más de las once —dijo Anselmo, a
quien todos llamaban el chato porque tenía una nariz de un tamaño descomunal—.
Estábamos a punto de irnos a almorzar sin ti.
—Lo sé y os agradezco que me hayáis esperado. Perdonadme, es
que me ha entretenido mi hijo. Llega a casa como un torbellino y lo quiere todo
para ayer —se disculpó Ramón, como pudo.
—¿Y qué quería tan de mañana? —preguntó, casi balbuceando,
Rafael, sin quitarse el cigarro de la boca.
—No sé. Algo relacionado con mi testamento. Desde que me dio
el amago de infarto, está un poco alborotado —contesté.
—Los hijos son unas sanguijuelas. Suerte tendrás si no te
mete en una residencia. O en un asilo de tercera —terció Cosme, un octogenario,
veterano de la legión, que siempre estaba contando batallitas, al más puro
estilo Cebolleta. Sus favoritas eran las de la guerra de Ifni, en la que había
participado siendo casi un adolescente.
—No digas eso, Cosme —le reprendió Anselmo—. Nadie tiene la
culpa de que tengas más hijos que Julio Iglesias y que, encima, ninguno quiera
verte.
—Bueno, al lío, vamos a almorzar, que ya estoy aquí —dijo
Ramón, intentando evitar las divagaciones a las que aquel grupito era tan
aficionado.
—Eso, que tengo hambre ya. Y estoy un poco cansado de
escuchar la excavadora, que hoy me tiene loco —asintió Germán.
Y así, aquellos cuatro amigos a los que las obras y el
destino habían unido, abandonaron por un ratito la entretenida actividad a la
que —con la misma puntualidad y devoción que cuando estaban en activo— dedicaban
toda la mañana.
Y, con paso lento y cansino, se dirigieron al bar de la Patro,
a comerse unos chorizitos a la sidra que, como solía decir Anselmo, eran buenos
para el colesterol. Siempre iban allí. Y es que la Patro hacía descuento a los
intrépidos jubilados que decidían hacer un alto en el camino para recuperar
fuerzas, pues, hasta que no se pone en práctica, nadie puede imaginarse lo
agotador que resulta dedicarse a “mirar obras”.
Supo que quizás ese era el lugar que buscaba, esa ciudad donde
comenzaría una vida nueva, con la ilusión de una adolescente y la
serenidad de una mujer madura. Ese era el lugar, esa era la ciudad, ese era su
sitio. Allí encontraría la paz que necesitaba, esa paz donde la
haría olvidar su pasado y solo disfrutaría de su presente. Esa
casita al lado del mar, donde desde su cama escucharía el sonido de las
olas, donde vería el amanecer, donde la gente de allí era genta amable,
empática, donde no había envidias, arrogancias, prepotencias, donde todos
se veían iguales. Ese jardín donde podría tomar sus
cafés viendo como como empezaba un nuevo día, donde escucharía a los
pajaritos despertar, el pueblo amanecer.
Ese era su sitio.
Ese era su sitio, pero... Quién lo hubiera dicho!! Aparece sonriente con una carpeta en las manos. Alto y delgado, moreno, gafas, traje, pelo rizado. Con más nervios que elegancia, rebusca entre las fundas transparentes. Disidente de la modernidad, contrasta con los compañeros. Extiende sobre el atril del piano cuatro páginas y apartando el extremo de la chaqueta toma asiento. Son cuatro, pero hacia él va mi mirada. Comienzan a sonar unas notas conocidas: "el concierto de Aranjuez"... ¡Estupor! De pronto y sin previo aviso, pero con la intuición de que así sería, se une la batería, el bajo, la guitarra y, se hace la magia. Las notas locas del jazz inundan la sala. Solos de presentación. Termina la canción. De nuevo se pone en pie. Guarda las partituras en una funda. De otra funda saca otras; las coloca. El bajo le mira muy fijo. La guitarra mira al suelo. "Es quien manda" pienso. Inicia su movimiento. Salta 1, 2, 3, y hasta 4 veces sobre cables y altavoces hasta que alcanza el micro y, sin dejar de sonreír, habla: "La Universidad Alfonso X nos ha invitado..." Tiene una voz agua y profunda que no corresponde a su apariencia. Sus mofletes rosados incitan al pellizco. Transmite seguridad, es divertido, se mete al público en el bolsillo. Salta otra vez de regreso a su piano. Suena a un rock que nos atrapa. Suenan las "palmas" y "bravos"... Ese era su sitio!
25/02/2022
Ese era su sitio. En medio de la nada más absoluta, sin ojos inquisidores, sin palabras como dardos, sin manos como cadenas, sin pensamientos agazapados, sin contaminación mental, sin sonrisas que se borran cuando te das la vuelta... Sin nada de lo que había sido su vida. Allí, en medio de aquel vacío, Ula descargaría a toda su energía limpia, sacudida de lastre innecesario, deshaciéndose en moléculas qué crecerían para convertirse en seres blancos.
25/02/2022
Para convertirse en seres blancos , en sus moléculas de ADN se incorporaron dos nuevos pares de cromosonas nuevos , les añadieron neuronas inmaduras y algunas más de la cuenta en el corazón y cerebro para que sus decisiones , percepciones y recuerdos no fueran tan locas como la raza humana había demostrado durante siglos.
Fueron adiestrados, dirigidos y aleccionados durante meses en un plano
paralelo hasta que se decidió cual sería
su planeta a colonizar.Sin embargo, al equipo de científicos se les pasó por alto anular su voluntad.
Llegarían a Sinemotiont y harían de él un lugar para vivir . Todo parecía ir bien hasta que los seres blancos se desprogramaron de una manera arbitraria y decidieron abandonar los paradigmas científicos que repetían una y otra vez.
Nadie ,desde el otro plano, podía presagiar lo que estaba por llegar.
25/02/2022
Lo que estaba por llegar era un personaje, de esos que recaban información espontanea y que luego dan lugar a la lucha de poderes, y luego, cuando cruentamente la lucha se vuelve clase y, cuando acto seguido, la clase se vuelve beligerante, los espacios se acotan y el mundo se vuelve infinitamente pequeño y el pequeño se siente un gran hombre.
En esas claves respondía yo a atardeceres tibios, de esos que nintiendes y nitenteras -a los que el sabio catalogaba como atardeceres ni fu, ni fa- y que resoplaban por las ventanas abiertas exabruptos llenos de aire viciado al mundo. El mundo los respiraba ignorante de sus propios anhelos. Eso daba paso a que muchos con las lágrimas encendidas se refugiaran donde buenamente podían.
Yo con el corazón encogido me asomaba a la ventana mirando la piedra al otro lado del cristal, única defensa que yo podía confrontar a tanta locura y que consistía en ablandar sus corazones... No se me ocurrió nada mejor que ir a la estantería y arrojarles a la cabeza "La piedra en la ventana", con la única esperanza de volverlos un poco más sensibles.
25/02/2022
Entonados a dos voces lograron parar el tiempo, convirtieron el vendaval en suspiro, la tormenta en susurro, la lluvia torrencial en gotas de caricias, el fuego aniquilador en amables brasas. Sus dos voces se unieron entonces en el delirio del esplendor, y ya todo fue calma.
28/02/2022
La invasora lengua de Idea nunca deja de trabajar. Expone teorías, explica conductas, critica comportamientos... Y siempre dice verdad. Idea, todos lo saben, está por encima del bien y del mal. Su lengua dicta las leyes que nos rigen. Todos siguen a Idea. Todos son una tribu unida. Yo nací en Todos pero ahora soy Una. Al principio seguía a Idea con fidelidad, convertida en el paladín de sus causas. Admiraba a Idea, quería a Idea y veía a través de sus ojos. Idea sembraba en mí. No soy consciente de cuando Duda entró en mí. Luego vino Necesidad y entonces constaté que Idea no actuaba según decía. Cada vez Duda crecía más y más hasta que desperté. Ahora Duda se ha marchado y aunque existe Necesidad, yo, que soy Una, me basto. Pero yo pertenezco a Una y Todos están con Idea. Veo jugar a Todos justo en la orilla de enfrente. No quiero volver a Todos, no puedo volver a Todos, pero me gustaría que Una fuese Varios. A veces creo encontrar a Otro, pero resulta ser otra forma de Idea. Así que, salvaje, juego con mi palito en el agua mientras converso con Soledad.
02/03/2022
Mientras converso con Soledad —mi única y etérea compañía—
recuerdo lo que un día fui, hace mucho tiempo, antes de que ellos —los sabios,
los infalibles, los perdonavidas— me desterrasen, condenándome a permanecer
aislado en este remoto islote, en el cual carezco de casi todo, aunque no del
bien más preciado: la libertad.
Mi vida fue un torbellino. Saciado de placeres, colmado de
abundancia, rebosante de amor, desperté envidias que resultaron mortales.
Todavía dudo qué es más cierto: si, que los envidiosos dominan el mundo, o que los
que dominan el mundo son unos envidiosos.
Y, en las frías noches del invierno austral, sólo el
recuerdo de tu cuerpo junto al mío en lo que un día fue nuestro tálamo, de tu
boca en mi boca derramando miel y de aquellas promesas que nos hicimos en
interminables noches de lujuria, me mantiene en pie.
Y, como una foto fija en mi mente, sólo pienso en el día en
que nuestros cuerpos vuelvan a fundirse en ese abrazo eterno del que ya nunca
querré volver.
Cuentos me contaron.. Cuentos de Calleja, de María Sarmiento, cuentos chinos y cuentos de nunca acabar.
Vivir del cuento nunca fue uno de sus objetivos. A esa conclusión llegó Natalia tras llegar un día a casa . Un día como tantos en lo que empezó a escribir….
Érase una vez un cuentista tan aburrido, tan aburrido… que todos los cuentos que contaba hacían dormir a las piedras. Solía terminarlos relacionando felicidad con perdices y precipitaba siempre los finales , porque quienes los oían preferían antes contar ovejas y cerrar los párpados .. que escuchar el cuento de nunca acabar.
Pero …¿ A cuento de qué viene este relato? Y tú…¿ qué te cuentas?..
03/03/2022
Y tú...¿qué te cuentas? Le pregunta él, después de mirarse a los ojos, de sonreirse, mientras inician la velada. ¿Paseo o café? Parece que va a seguir lloviendo.
Llevan hablando días, después de contactar en aquella aplicación.
Piensa que ha vivido ya este momento del primer encuentro, cada vez con esa ilusión, con ese pellizco en el estómago.
Como siempre, cuenta la verdad y estará muy atenta a todas las señales.
Otra vez la oportunidad. Puede que esta vez sea la persona adecuada...sería fabuloso.
Parece tan simple, pero no lo es.
Ya estás en Marte… o en Júpiter, cuando imágenes tan bellas
llegan a tu mente sin ningún esfuerzo, incluso durmiendo.
Como esta mañana, sin ir más lejos. Yo dormía plácidamente
—con ese sueño tranquilo y reparador con que Morfeo nos obsequia a las personas
de corazón blanco— cuando, de pronto, me desperté.
Y, las últimas imágenes de mi sueño, aún estaban frescas en
mi mente. Estábamos en la cama, en una postura insólita: tú encima de mí, de
espaldas, desnuda. Y yo te acariciaba lentamente, recorriendo incansable tu
cuerpo, una y otra vez.
Cuando abrí los ojos, todavía podía oler tu perfume. Y, en
mis manos —ahora yermas—, aún estaba impreso el delicado tacto de tu piel.
Hacia tu cuerpo, vida mía, camina mi desdicha. Roto, desarmado, dolorido, desubicado, descabezado, vacío sin tu piel, recorro el sendero que me precipita a otros abrazos intentando reencontrar el tuyo. Pero no encuentro tu olor, ni la tibieza de tus huecos, ni el desvarío de tu cama. Intentando borrar las huellas de tu boca, de tus dedos, de tus miradas, me hundo en falsos placeres que me devuelven nuevamente al vértigo tus caderas, y no puedo hacer otra cosa, vida mía, que volver a imaginarte.
- No puedo hacer otra cosa que volver a imaginarte- .Me decía, mentalmente, mientras caminaba por los pasillos de aquel lóbrego edificio cuya luz fue extinta por el pasar de los años, -y mis años se vendieron en el mismo pack- me repetía con sonrisa agria mientras hacía una ronda más por aquel orfanato, asegurando, si se puede hacer tal cosa, una tranquila noche a los pequeños desheredados. De repente, una tímida mano rozó la mía y volviéndome, vi a uno de esos pequeños, despierto, cuyos ojos apagados eran más profundos que la oscuridad envolvente, comprendí que me quería decir algo y conuna voz tímida y anhelante depositó su mensaje en mi -Cuando estés fuera, decidle a alguien, a quién sea, que estoy aquí...-
05/03/2022
Cuando estés fuera, decidle a alguien, a quién sea, que estoy aquí...-
Pero al salir del recinto se le olvidó, su mente se llenó de luces, colores y brillantes. Todo el exterior estaba inundado de voces y griteríos en torno al mercado de abastos, el olor de las comunas y los despachos de pan hicieron el resto.
El discurrir del gentío, el olor a comida recién hecha y los barcos llegando a sus estaciones dejaron el ambiente dispuesto a dejar olvidada a aquella persona encerrada
05/03/2022
Aquella
persona encerrada en su mundo, encerrada en unos recuerdos traumáticos,
encerrada en el por qué? En los porqués?
Aquella
persona encerrada sin saber cómo salir, hundida en un mundo que no
creía ser justo, encerrada en una vida dura y el por qué? y los
porqués ? no salían de su cabeza , sin ser consciente de que esas
preguntas jamás tendrían respuestas, sin ser consciente que era la
vida que la había tocado vivir , sin más preguntas , sin más respuestas.
Pero.... como sería capaz de seguir viva, como sería capaz de no tener en mente
el querer desaparecer, día tras día era una lucha para ella, sería
capaz de quitarse esas ideas? o quizá no las quería quitar , porque
de esa manera no quería seguir viviendo.
—Muy alto. El más alto que
tenga. No me importa pagar un poco más, si lo vale —dijo
Héctor, con seguridad.
—En ese caso, lo que a usted
le conviene es el ático. Ocupa toda la cuarta planta —respondió
Calleja—. Es bastante más caro, pero
si no le importa el precio… Además, desde él, tendrá una espectacular vista del
puerto.
Alberto Calleja ejercía como admin.istrador del
edificio desde hacía años —muchos
años ya— y se ocupaba de todo: de arrendar
las viviendas, de cobrar los alquileres, del mantenimiento y, en general, de
cualquier problema que pudiera presentarse.
Un mes más tarde, Héctor ya había ubicado a
sus vecinos y había sacado sus propias conclusiones sobre ellos. Al menos, en
lo referente a los de la planta de abajo.
El vecino del Tercero Derecha era un payaso
con cara triste, que —con su
estrafalario aspecto— provocaba
más risas fuera del escenario que en él.
—Y con razón —pensaba Héctor—. Es
un pobre hombre.
En la izquierda, vivía una frágil muchacha,
que de vez en cuando aparecía con un ojo morado o algún otro signo de
violencia. Aunque ella aseguraba que era actriz, en el vecindario se rumoreaba
que ejercía la prostitución, algo a lo que Héctor daba bastante crédito.
Pero, era el vecino del Tercero Centro quién le
parecía más inquietante de los tres. Era un taxista de aspecto aparentemente
inofensivo. Pero a Héctor —un verdadero
experto en psicología humana— no le
convencía nada aquella fachada. Él pensaba que el tipo tenía una mirada
peligrosa y que, llegado el caso, sería capaz de todo.
Escribiéndome yo mientras te leo a tí; Bam, Bam, pum, clock... Se oye un gran estruendo. Dejo a medias la redacción de la carta a mi amante y me asomo al salón. Veo sangre. Hay un gran tumulto. Mi hijo, ¿dónde está? Subo escaleras arriba a su dormitorio. Está bien, está durmiendo. Gritos. Vuelvo al salón. ¿Qué sucede? No hay respuesta. Los hombres dicen disparates. ¡Yo le mato! Dice mi padre. ¡Cojamos palos! Apoya mi cuñado. ¿Qué sucede? Pregunto de nuevo. Calla mujer, ésto es cosa de hombres. ¿Dónde vais?, Añado. Aparta, sólo molestas. Salen por la puerta. No se qué sucede. Me asomo y sólo alcanzo a ver la oscuridad de la noche. Subo las escaleras y me acuesto junto a mi hijo, protegiéndolo con mi abrazo. Dos ríos de lágrimas mueren en el mar de mis labios y yo, que no entiendo nada susurro: todo está bien; nuestros hombres nos protegen, vida mía; con ellos estamos seguros. No han vuelto. Ya no lloro. Me dijeron qué sucedió, pero no lo entiendo. Miro los sabañones de mis dedos. No quise venderme al patrón de la fábrica y me lo hace pagar. Soy tonta, hubiéramos vivido mejor. "Feliz día de la mujer trabajadora, compañera" digo. "Eso es discriminación", contesta. Y pienso: "calla mujer" "quita de ahí, sólo estorbas" "si eres buena conmigo vivirás como una reina". Bueno, pienso, y grito: "¡pues viva el 4 de julio!"
08/03/2022
—Viva el cuatro de julio! —gritó una muchacha desde un lujoso cadillac
descapotable, mientras enarbolaba la bandera de los Estados Unidos de América.
Nos pusimos detrás de él justo en la Plaza de
Cibeles. Héctor —que era quien
conducía nuestro coche— parecía
disfrutar con el llamativo espectáculo y, pese a que circulaba bastante
despacio, no hizo ningún intento de adelantarlo. Y, así seguimos, a su rebufo,
hasta Plaza Castilla, cuando el cadillac entró en el parking de un hotel
situado junto a las Torres Kío.
En el trayecto, tuvimos una interesante
conversación.
—Hay que ver lo que les gusta
llamar la atención a estos americanos —dijo
Héctor, sin dejar de sonreír.
—¡Pufff! Son unos fantasmas y
unos creídos —dijo Sonia desde el asiento
trasero, visiblemente fastidiada—.
Mira como alardean de ser ciudadanos de un país superior.
—No seáis crueles. Quizá sólo
es que les gusta recordar el día de su independencia —intervine
yo, intentando poner un poco de paz.
—No sé por qué pensarán que
son superiores a nosotros, si no tienen ni nuestro arte ni nuestra historia —contestó Héctor, obviando mi observación.
—Pues sí —le apoyó Sonia—.
Al fin y al cabo, ¿qué obras destacadas tiene esta gente? Ya les gustaría haber
escrito El Quijote.
—¿El Quijote? —dije yo en tono sarcástico—. Lo que los corroe de envidia es no tener
nada comparable a la Gramática de Nebrija.
La inocencia era la principal seña de
identidad de Lucía. Aunque no necesariamente su mejor virtud. Su nombre, desde
luego, no podía ser más adecuado; como una luciérnaga, brillaba con luz propia.
Su belleza, su ingenio, su bondad, resplandecían en medio de la gris
mediocridad de la gente común.
Sin embargo, tenía un gran defecto: no sabía
dosificarse, sobre todo en asuntos de amores. Lucía era todo corazón y, en cada
nueva relación que emprendía, se entregaba sin límites, acallando en sus parejas
hasta la más mínima sombra de duda, esa duda tan necesaria como el oxigeno para
que la llama del deseo continúe ardiendo.
Y es que Lucía, en su inocencia, no se daba
cuenta de que lo que todo el mundo anhela es, precisamente, lo que no puede
tener o le resulta difícil conseguir. Un error que el transcurso del tiempo, por
sí solo, no logró enmendar.
Y, en su simpleza, se preguntaba por qué los
hombres siempre —pese a sus buenos comienzos— la acababan rechazando y partían en busca de
nuevas conquistas, dejando en ella tan solo un rastro de dolor, como
polvorientas crisálidas de estrellas.
Su caballito persa fue uno de los recuerdos que acompañaban a Sofía desde que era pequeña. La simplicidad de ese tesoro es lo que le hacía especial.
Siempre fue una mujer sencilla y por ello le gustaba rodearse de gente afín. Hacía ya tiempo que decidió no incluir en su vida personal a gente con ambages, demasiado cartesiana y con mensajes circulares que sólo conseguían aburrirla.
Las apariencias no le interesaban, como tampoco el hecho de destacar por destacar. Ella prefería tener a su vera “sencillos” que fuesen capaz de leer sus pensamientos sin necesidad de hablar, que brillaran sin proponérselo y que hicieran del sendero algo mucho más liviano y feliz.
Por eso, esta tarde .. Vuelve a leer a Leonardo da Vinci: “ La simplicidad es la máxima sofisticación”