Dormía y soñaba que unos brazos me abrazaban, más cuando me despertaba veía que era una utopía de esta mi alma compungida.
Brazos que con vuestros abrazos podeís hacer de mar de los Sargazos y atrapar a las barcas que se llenan de sequedad amarga y se convierten en las estepas mas yermas, aunque otrora fueran las más frondosa de las selvas.
Brazos que con vuestros abrazos podeís apartarlas de las galernas y conducirlas a playas de arenas eternas.
Tomad forma de ensenada y protegerlas del frio viento del odio y del rencor.
Y volví a soñar que soñaba que si yo en este mundo mandara serías una asignatura obligada aprender a abrazar con amor.
Más es imposible de conseguir.¡¡¡
Pero si puedo hacer una llamada a los brazos cercanos a mi.