Perdonar conlleva beneficios psicológicos, como la reducción del estrés y la promoción de la felicidad, y puede mejorar nuestro bienestar físico y psicológico. Es una elección personal y un proceso que puede llevar a una comprensión más profunda y empatía hacia la persona que nos hirió23.
En resumen, perdonar es una decisión intencional de dejar atrás el resentimiento y la ira, lo que puede traer paz y esperanza a nuestras vidas3.