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Café tertulia entre amigos

Marian   Marian, 60 TOP


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Apuntados
1
Plazas libres
98

📅 fecha 30 may 2020

🕐 comienza 18:30

🪇 Hombres y mujeres de 18 a 99 años

Top organizador   📈 1225

🔈                    

🗺  ¿Dónde se hace?

Café Santito en la Avenida de América, 29.



🌃  Punto de encuentro

Si sois puntuales: en la puerta de el Café SANTITO, Avenida de América, 29. Preguntad en la barra si no es así.


🔤  Información

Somos un grupo de AMIGOS abiertos a intercambiar ideas, sensaciones, vivencias, criterios, con personas participativas que lleguen con ganas de aportar algo, intentando establecer un diálogo desenfadado en el que primen el espíritu crítico, la sensibilidad, el buen humor y el respeto.

El tema a tratar es tan solo la excusa que facilita el encuentro y ayuda a conseguir una fluidez natural que propulse el emerger de afinidades y confluencias entre los allí reunidos con el propósito de pasar entre TODOS una tarde de sábado estupenda, en la mejor compañía.

Éste es un evento sin ánimo de lucro, no incluye cuotas ni comisiones para la organizadora.

Para asistir es necesario APUNTARSE y participar haciendo  algún comentario en el foro de la Tertulia, pues son ellos los que  propulsan las directrices de los temas que tratamos.

Muchas gracias.




✅  Apuntados



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📄  Comentarios

Marian Antonio, más allá de lo permitido, lo que es apuntada yo solo veo una. Un saludo. 2020-05-31 06:05:15
antonio alvarado Mirian. Hay toneladas de personas apuntadas. ¿Cuanta gente permite la fae 1? 2020-05-30 20:54:17
Marian Paqui, se te echa de menos. Emma, estaremos encantados de contar con tu presencia entre nosotros, en cuanto sea posible. Un abrazo. 2020-05-30 17:14:05
Emma Hola buenas tardes, me gustaría pertenecer al grupo e iniciar con las actividades en cuanto se pueda...gracias 2020-05-30 15:17:36
Gerald  Yo creo que será una etapa transitoria, que cuando se nos pase el susto todo volverá a la -normalidad-, pero hablo en genérico, cada persona tiene su propia -normalidad- y capacidad para aprender de lo ocurrido. Lo ideal esque tras este soporífero parón nos volviéramos mejores seres humanos y promoviéramos una forma de vida y relacionarnos más sana, pero creo que es algo demasiado subjetivo para que sea global y que en general, la sociedad no cambiará a grosomodo, pero que siempre habrá personas para que aprovechen lo vivido para cambiar de rumbo. 2020-05-29 18:24:01
Marian Paloma, por ahora aún no es posible reunirse, sólo participamos intercambiando opiniones a través de este foro. Un saludo. 2020-05-29 17:12:35
Locco´pizza Alguien sabe algo del denominado Expediente Royuela...?; muchas gracias. 2020-05-29 15:29:48
PALOMA  Buenas tardes! Quisiera apuntarme... Es posible? Bueno, nunca he ido, pero me parece interesante Muchas gracias! Paloma 2020-05-29 14:54:06
Marian María, aún no es posible. En las terrazas no se permiten grupos, ni durante tanto tiempo.
Estoy totalmente de acuerdo contigo, Jose Antonio.
Ya hace dos semanas que te preguntabas:
“¿Vamos a llevarnos bien tras la hecatombe?
¿Vamos a construir nuestras vidas sobre los valores esenciales?”
Un abrazo.
2020-05-29 14:11:15
jose antonio  No hace tanto, sobre los asuntos de la vida decíamos, y creo que con buen sentido, aquello de que cada uno tiene sus RAZONES (sus experiencias, sus circunstancias, su pensar). A partir de ellas se podía dialogar. En esta Era del Fanatismo que tenemos delante, más bien parece que cada uno tiene sus ODIOS (su bilis, su prejuicio, su cerrazón). Antes, a una persona casi le definían y describían sus pequeñas aficiones, hoy sobre todo a la gente son los Grandes Odios los que les constituyen y poseen. Incluso los fanáticos de hoy lo son más del ODIO al adversario que del AMOR al propio IDEAL, por pésimo que este pudiera en la realidad ser. Como si el aglutinante básico de la personalidad hubieran pasado, de ser las razones, a ser los odios. Eso, claro, dibuja los perfiles de una sociedad basurienta y cainita. Un abrazo, amigos. 2020-05-29 11:49:37
ana Pensé que el coronavirus sólo atacaba a la salud física, pero parece que además provoca efectos letales en la moralidad y la coherencia de las personas... 2020-05-29 08:11:11
Marian  Que yo sepa no critico la sana práctica del diálogo,
analizo el hecho de que alguien entre en un “vecindario” y se dedique a tirar zapatos con tachuelas incandescentes sobre la gente que allí habita sin más ni más,
y comience a etiquetarlos con la perversa intención de pasar luego a la flagelación pertinente o más bien “impertinente”, siguiendo sus condicionantes y descalificativos parámetros.
Que quede claro que está lejos de mi intención impresionar a alguien,
y más cuando ya llega presa de un convulso y agitado delirio,
no sé si víctima de la egolatría o de cualquier otro elemento convulsivo.
Ignoro si la difusión del texto que nos obsequias es de carácter propagandístico, divulgativo o reivindicativo, pero si así te has quedado a gusto, lo damos por bien venido.
¡Que la paz sea con nosotros!
2020-05-29 07:38:59
"Fer  Dónde estabas entonces, cuando tanto te necesité. Nadie es mejor que nadie, pero tú creíste vencer. Y entonces llegó él, surgió con la certeza y la razón y su verbo fue la luz del faro que nos rescató de la sombra de la ignorancia. Gracias por aparecer y mostrarme su camino, no sé cómo hemos podido sobrevivir sin usted sin hacernos daño. 2020-05-29 07:34:14
Javi70 A Marian, que practica la verbosidad que critica. A mí no me impresionas; practicas una burda manipulación consistente en el argumento del hombre de paja, poniendo en boca de alguien lo que no ha dicho, atribuyéndole intenciones acomodadas a su conveniencia. Yo con las opiniones e ideas que se ponen en circulación, no soy respetuoso, porque se ponen en juego para confrontar. Y sí, me parece propio de idiotas tratar como a menores a la sociedad que trata de desenvolverse libremente. Para no prestar atención ya le has dedicado una parrafada a contestar para hacer un ejercicio de espiritualismo de andar por casa, del que no se puede decir nada crítico, porque es una sarta de obviedades. Veo que usted no tiene nada que aportar sobre la cuestión de fondo, y el propósito que hay de prescribirle a esa -persona- y su -ser- que tan floridamente evoca, cómo ha de desenvolverse, y lo mal que lo hacía antes y la oportunidad que tiene de arrepentirse y corregirse, y de paso de asumir un nuevo orden de forma obediente. Yo percibo la realidad en que vivimos, y me rebelo ante el conflicto ideológico, de intereses que late, para implantar, no ya sólo a nivel mundial, sino en España, esa -nueva realidad-. Su espiritualismo escapista me interesa muy poco. Ante los idiotas de la nueva realidad como imposición al individuo, me rebelo. Y van disfrazados de apóstoles del miedo. 2020-05-29 01:00:07
Marian  Los apóstoles del miedo...
Me parece que esa congregación no pulula por estos derroteros, si buscaba encontrarse con ellos para soltar sus diatribas, porque son las que mejor domina y poder parecer elocuente, se ha equivocado de paraje.
Aquí no se practica esa doctrina, por no tener no le tenemos miedo ni a usted que ha entrado insultando y sin mostrar el más mínimo indicio de respeto.
Me va a tener que perdonar, pero no sabía que teníamos la imposición de tener que pedirle permiso para denominar la realidad como mejor nos viniera en gana,
pero ante todo, sin desprecios y sin un ápice de tiranía hacia ningún ser humano, sea de derechas o de izquierdas.
Porque por poder ser, se puede ser persona de derechas o de izquierda; porque lo importante no es el giro lateral, sino el verbo SER que lo precede y la PALABRA PERSONA, en la realidad que sea.
Aquí no nos importa cómo llamen a esa realidad, sólo el procurar que sea respetuosa, solidaria, confortable y LUMINOSA.
En nuestra realidad soñada no existe el miedo, pero tampoco el odio, ni el insulto.
Y como no tenemos previsto, siguiendo sus indicaciones, arrastrar graves traumas provocados por innecesarios desprecios, o tener que recurrir al subterfugio del victimismo; discúlpenos si no le prestamos mayor atención, y nos quedamos en nuestra “estomagante” paz interna.
2020-05-28 20:41:21
Javi70 Resulta ya ridículo leer a todos los apóstoles del miedo, cómplices de la campaña orquestada para aprovechar [no se sabe si previamente han provocado la pandemia o sólo la aprovechan] este miedo colectivo para legitimar esa estúpida nueva realidad. Leer aquí al típico miedoso con su arsenal de mascarillas y geles a cuestas criticar que se quiera recuperar la actividad económica, o que la gente quiera recuperar su ANTIGUA REALIDAD , hace perder la confianza en el ser humano, pero por lo contrario que ellos predican. Todo este pack mental lo ha abrazado la izquierda anticapitalista, que no sé si algún día nos dirán cómo quieren ellos que se mantenga el bienestar alcanzado por las sociedades por una vía alternativa. Estos idiotas no sé si han creado nunca una empresa, y puede que nunca hayan trabajado en ninguna. A veces creo también que arrastran graves traumas y quieren que la gente viva unas vida austera y monacal, y todo lo que escape del modelo de vida que han ideado para la sociedad les parece explotación empresarial, consumismo, y fiesta y desparrame, como dice aquí uno de esos apóstoles del miedo. Podíais quedaros en vuestra cueva y dejad que la gente haga lo que quiera, dentro del respeto mínimo de unas normas de interés común, pero sin ir más allá e instaurarles un nuevo modo de vida bajo ese aura de superioridad moral tan estomagante. Seguid con el pánico y dejad que la gente salga y se relacione. 2020-05-28 12:30:10
"Fer  Para que un ser humano haga un cambio en el modo que lleva a cabo las cosas cotidianas, y/o introduzca nuevas acciones y se consoliden han de darse varios factores. Uno es el tiempo, la constancia; otro es la voluntad, querer hacerlo; y hay una que de no darse, poco se puede esperar. Es que sea necesidad y que esté en juego algo muy importante que se puede perder. Actuamos mucho más por miedo a perder que por el deseo de lograr. Cuántas promesas incumplidas hay un mes después de año nuevo o a la vuelta de vacaciones. Solemos buscar la satisfacción inmediata y no planeamos acciones a medio o largo plazo que nos reportan gratificaciones diferidas con mayor ganancia y beneficio. Desde hace décadas el esfuerzo no está de moda y sí los modelos tramposos del atajo con poca entrega. Los cambios de hábitos requieren, además de lo dicho antes, una buena dosis de intencionalidad argumentada, no porque sí, si no por concretos y específicos con fechas y por escrito: así funcionan. Y si ya hablamos de cambiar conductas, aquí ya sí que hace falta un cambio de pensamiento y conciencia. En fin, que mucho me temo que de aquí a no mucho tiempo, ni mascarillas ni distancia social. Incluso os comparto que a veces tengo la sensación de que todo esto está siendo una especie de ensayo, de una maniobra de alarma orquestada desde muy alto; una gran guerra no se ve muy viable, pero las consecuencias se ven parecidas, con menos bajas eso sí, vaya... que parezca un accidente. Lo triste, terrible y lamentable son los prójimos que se nos han ido. Un abrazo grande, cuiden y cuídense mucho. 2020-05-27 18:55:00
Jorge  Nueva normalidad. Que paradoja. Los periodistas de este país han acuñado un oxímoron y se han quedado tan panchos. Parece mentira que profesionales de una carrera de letras se comporten con tanta negligencia e irresponsabilidad con el uso del idioma, pero ése es otro tema. La verdad es que de lo que nuestra sociedad ha pasado y nuestros familiares y amigos han sufrido en sus carnes no hemos aprendido NADA. Todos los estudios serios de todos los países nos dicen que ésta ha sido la primera ola del tsunami epidémico del coronavirus y es imprescindible una vacuna efectiva y una campaña mundial de vacunación para erradicarla. Y nos estamos comportando como si aquí no haya pasado nada. Acabamos de pasar de nivel 0 al 1 y nos comportamos no con una nueva normalidad, más responsable, sino con la vieja normalidad irresponsable. Los empresarios están como locos por recuperar la actividad económica y por ende sus beneficios y nosotros estamos locos por la fiesta y el desparrame. El muerto al hoyo y el vivo al bollo. Allá cada cual. Pero luego no nos quejemos, lloremos, pataleemos o nos rasguemos las vestiduras. Somos adultos y sólo nosotros somos responsables de nuestros actos. No le echemos la culpa a nadie de lo que nos ocurra por irresponsabilidad. Por mi parte la mascarilla y el gel desinfectante forman parte de mi vestuario y forma de vida. Han venido para quedarse, lo mismo que el coronavirus. 2020-05-25 13:10:11
francisco jose  La naturaleza ha puesto en evidencia los límites de nuestra civilización. Eso nos invita a reflexionar sobre un mundo más equilibrado y solidario. Hace unos meses no nos imaginábamos nada de lo que nos sucede, si está lección no nos enseña la modestia, nunca nada podrá. 2020-05-24 11:26:07
carmen Creo que necesitaremos reinventar una nueva normalidad, fundada en una “nueva moralidad” solidaria, menos tintada de apariencias y con un mayor substrato de valores esenciales, de respeto íntimo, de reciprocidad y de compromiso social y cívico. 2020-05-24 07:56:31
Juan Esta excepcionalidad está alumbrando deficiencias de nuestra sociedad que habíamos “normalizado” y que la emergencia nos ha obligado a constatar.
Ahora sólo depende de nosotros el intentar cambiar las cosas o alimentar el que todo siga igual.
2020-05-24 07:51:05
Ana Siempre que el inmovilismo se lo permita. De todos es sabido que cambio e inmovilismo están en permanente disputa. 2020-05-24 07:44:01
Laura  Todo lo nuevo debe conquistar fronteras acordes con las emergencias circunstanciales. 2020-05-24 07:41:10
Marian  Una curiosa expresión, tan inquietante como movilizadora, ha invadido el análisis de lo que está ocurriendo y de lo que podría ocurrir con la epidemia de coronavirus: “nueva normalidad”.
Un nuevo marco que ha llegado a nosotros con unas nuevas circunstancias y escenografías variadas y curiosas, instaurando diferentes barreras invisibles entre personas que legitiman la presencia y la ausencia en el mismo marco circunstancial, extremadamente versátil que hace que nos sintamos a la vez acompañados y aislados.
La pospandemia no solo es una incógnita, es, sobre todo, un territorio en construcción que podría estar configurando una nueva normalidad fundada en el cuestionamiento de las (a)normalidades preexistentes.
¿Se trata de un paréntesis excepcional y pasajero tras cuyo final se recreará la «normalidad» preexistente? ¿O se trata en realidad de una metamorfosis más profunda y duradera superada la emergencia?
2020-05-24 07:35:55